¡Tal y cómo en la guerra!
¡Tal y cómo
en la guerra! También La Paz en Cristo-Jesús Es Su Paz, Amor, Posicionado en Su
Espíritu Santo, por Tanto, en y la tal, y todos, somos los protagonistas
actuales del momento, y nueva época, en Llegados al Encuentro-Purgatorio, dé y con Jesús-Cristo, en
los Primordiales-Ángeles, qué y también
devenidos Reales y Ciertos, Dádivas, u Percepción por Aludidos-Física y Espiritualmente, en los Certeros y Nacidos de Mujer
Su Eternidad e implicados en La Verdad, Amigos-Hermanos/as,
Su Verdad, y Descendientes Generación tras Generación Conscientes de La Misma y
en Tal, ha el qué unos van y forzados, en su mayoría aun a la misma guerra, a morir de nuevo, y a él que en algunos,
y menos, aún, para matar en defensa
propia por sobrevivencia, e indistintamente a cómo Hombres y Mujeres en Su
Santidad, y libres, voluntariamente en Defensa de La Casa, él, (Hogar-Morada-Familia y Propiedad en los Unos,
Un Alma, Trinitariamente del Padre, u, y de La Madre), y que en coaccionados
por el imperativo de los otros, también, hombres y mujeres físicamente sistematizados,
envalentonados en pos y por sus intereses particulares, cómplices atacantes y solos,
aunque con los forzados u agradecidos, así, pagando las prebendas sin poder, y ni
merecer, el negarlo por comprados e indistintamente, con las treinta monedas de
plata, ganándose su juicio personal, en, y para los mismos de algún modo aún unidos,
u reunidos, y sin comprender su auténtica soledad-ateísmo-concupiscencia, y siempre formando el ruido cacareándolo en
escándalo y de enfrentados, del largo tiempo-recorrido entre materialistas y descontentos, u, e incomprendidos avariciosos,
populistas común, o sea, u, lo que es lo mismo, comunistas anti-comuneros-Propietarios, social y legalmente reconocidos-aceptados, y qué de lo conocido en él
mismo tiempo-presencia en Sí de Eternidad Vitalmente y el que
lo expongo Concienciado de ello. Génesis.
Cp. 4. Vs. 17 al 26. Que, y por consiguiente en los otros libre y
voluntariamente, que también, a que los maten los vencedores y siempre-Amados-Hijos, aunque y en la
inconsciencia de entre ambos conceptos, del qué mata, por imposición, o del que
muere en defensa de Sus Principios y Sus Valores-Fe y Obras, y los cuestionado en lo efímero dé incrédulos, e
incrédulas-ateas-ateos, más bien, mortecinos
y no en la ignorancia sino y qué en deambulando y a las caídas, que de la malicia-exteriorizan entre muertos vivientes-temporalmente y al rebusco, no tan pocas
veces, de mal intencionadamente en confundiendo ha el término del tal,
rebuscando, con y de los vivos u, listillos que y también, tibios-latentes-indecisos al por mayor, y no
tanto, y ni tampoco francos-Franco a
salvo en Eternidad sin La Conversión total en Fe, y Obras Conscientes de
Cristo-Jesús Resucitado Viviéndole Espiritualmente en Su Espíritu Santo, Él,
qué Reina de Su Reino-Eterno-Divino Conscientes
en y dé Su Vida, Su Verdad, Su Paz Misericordia, en Nosotros-Hermanos-Amigos, Divina Providencia, u,
y La Heredad-Divinidad-Propiedad-Moradores-Moradas,
y los cuerpos, materia, carne y sangre, en definitivas-temporal, que muere y enterramos en Santo entierro, a Su Respeto y
Santidad Eternidad del Mismo, Dios-Amor,
y Posicionados dé y en Su Cuerpo Celestial, Física y Espiritualmente en Sus
Moradas e indistintamente Santas Familias en Su Santidad Humanada y solo a Su
Agrado, en Reciprocidad a Su Vinculo y Amistad, Eterna, a, La Derecha, de La
Derecha del Padre y Señor Nuestro Jesús-Cristo-Dios, Nosotros, Hijos Amados de Él, en Él, y para Él. Amén. Amén. Amén.
Julio Barriga
Carrasco.
La Oración y qué en un
Principio, la inicié, inspirada tal para en una canción, y qué os la pongo y de
nuevo También, en éste Propio escrito, para qué en la razón, qué en aquel, u
aquella, le vea la gratitud, y que en Tal nos la ofrece Él Señor, También le
pueda, aparte de la oración, qué También quedará Tal y como ya la conocemos, a
adaptarle, una música, acorde a Su Respeto, y Agrado de, sus Preceptos, y
Mandamientos, y en Conciencia Mismamente en la Confianza de mi Fe,
Gracias Señor Jesucristo Hijo Único y
Querido Divino de Dios Padre Creador Divino
De todo lo Infinito en Su Santo
Espíritu, Gracias de Nuevo Señor por mostrarme
Al Padre Creador Nuestro, y
mantener mi Plena Libertad en Conciencia aún También
De éste Mismo Nuevo Momento,
Postrado Ante Ti desde mí Gran Amor, y La
Confianza en mí Fe que Tengo Para
que me instruyas a Tu Voluntad, En la Forma de
Tus Preceptos y de Tus Mandamientos,
Porque Solo Así Y en él Calor de tu Inmenso Amor Y Misericordia,
Pueda Cumplir La Misión de Tu
Mandato, que Es por Ti Dispuesto desde el Principio
De Los Tiempos, en Cada Una, y en
Cada Uno, Indistintamente de Tus Hijas, e Hijos, que como Tal
Quiero Voluntariamente y acepto yo
La Mía que por Tu Gracia Divina me Corresponda
Llevar a Cabo En Tu Divina y Santa
Gloria, Tal y como Era en él Principio lo Es ahora y lo Será por Siempre,
Gloria al Padre, Gloria al Hijo, y Gloria al Espíritu Santo, como
Era en el Principio lo Es Ahora y lo Será
por Siempre y por los Siglos de los Siglos. Amén. ¡Que así sea! Amén.
Amén. Amén.
Julio
Barriga Carrasco.
Así Católicamente y con Éste Mismo
Espíritu nace, Él Credo Largo como es conocido en Nuestra comunidad, Cristiana,
Tal, como el Credo Católico, y él qué en Sí, y así en la confianza de mi Propia
Fe en Jesús-Cristo me Profesa en Su percepción que me Alude, percibo y Creo. Y
a diario lo medito en Discernimiento junto con Las Oraciones en Las que Creo y
Vivo.
Creo en un solo Dios padre todo Poderoso.
Creador del cielo y de la tierra, de
todo lo visible y lo invisible.
Creo en un solo Señor, Jesucristo, Hijo
único de Dios,
nacido del Padre antes de todos los
siglos: Dios de Dios, Luz de Luz,
Dios verdadero de Dios verdadero,
engendrado, no creado,
de la misma naturaleza del Padre, por
quien todo fue hecho; qué por nosotros,
los hombres, y por nuestra salvación
bajó del cielo, y por obra y gracia
del Espíritu Santo se encarnó de María,
la Virgen, y se hizo hombre;
y por nuestra causa fue crucificado en
tiempos de Poncio Pilato;
padeció y fue sepultado, y resucitó al
tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo,
y está sentado a la derecha del Padre; y
de nuevo vendrá con gloria para juzgar
a vivos y muertos, y su reino no tendrá
fin. Creo en el Espíritu Santo,
Señor y dador de vida, que procede del
Padre y del Hijo, que con él Padre y el Hijo
recibe una misma adoración y gloria, y
que habló por los profetas.
Creo en la Iglesia, que es una, santa,
católica y apostólica.
Confieso que hay un solo bautismo para
el perdón de los pecados.
Espero la resurrección de los muertos y
la vida del mundo futuro. Amén.