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miércoles

¡La Humanidad de Jesucristo!


¡La Humanidad de Jesucristo!, qué yo Corroboro en Conciencia así Católico y, en Cristo, Tal de lo ya dicho y escrito También de Sí, y en, Él, por Él, y para Él, el que digo: Una cosa certera y positiva, así Física y de Alusión Espiritualmente en eternidad, Vivo, en el que sí lo Es Cierto, él Ser Unidad u Santidad-Divinidad, Procurándolo en él Discernimiento y Sensato con La Ilusión Al Agrado del Señor, Dios Nuestro y de Jesucristo indistintamente Él, entre todos, y en Todo Lo Divino e Infinito de Su Santo Espíritu, Dios, Un Alma, y qué Nosotros Su Santidad, en Cristo, lo Es Vida solo para Él, y por Tanto, Espiritualmente en Sí La mía Propiamente También, y así Conllevando a Dos Generaciones en Sí Constante qué percibo, qué Es Mismamente en mí Alusión, así Percibida, La Continuidad que Familiarmente en la medida de mis propias posibilidades Profeso, y Vivo, en Realizándola cumpliendo Sus Mandatos, y así el que También es, y no menos, de en quienes también si Unidos y entre sí en procreándose dé, hombre y mujer, en Su Propio Amor de Paz Misericordiosa en Caridad mutua, que es él Progresar, pero ya, lo Es de Él y en Su Propia Santidad. Por lo que si en actitud concupiscentemente y sin arrepentimiento alguno, nunca se es, y ni, podrán ser en sí de cada cual, familiar u personalmente, tres “santos en sí, u Divinidad-Sensibilidad” sin estos los imperantes preceptivos, y Gloria del Padre, incluso ni, de como en lo que popularmente es hoy y aún en uniéndose solo, civil u matrimonialmente así por las costumbres imperantes e impuestas, ya tan arraigadas del mundo que los arrastra y asumen en la inconsciencia pero obedeciendo a sus intereses personales e indistintamente cegados. Porque sin santidad, el qué denostará en detrimento a la personal posibilidad de recuperar y si por su perdón, en Gracia-Divinidad, a Su Propio Reino Santo ya, por Tanto, Santo, y Sumando así, en él de Dios, por lo que, sin qué dos Santos, o al menos, una de las partes en él compromiso, ya en Cristo, y la otra, por Tanto, en aceptándolo, y mientras en la Fe por Su bautismo, le llega su conversión plena y, e indistintamente así, de entre ambos, porque también Prójimos y en Sí, lo fue Éste, u Ésta, antes en cualquiera, y qué en Él Espíritu Santo, y así, el qué Se han de hacer, u se hagan, Uno Solo, en Auténticos del, Santo Matrimonio Cristiano, y así También, en el del Encuentro con él Amor Verdadero Mismamente, integrantes u conciliados en Cristo, en tantos hoy y Recompuestos así ya de entre Sí, del Espíritu Santo, en cada vez más y más, y de algún modo en muchos, sin que la misericordia de la Santa Iglesia asome aún con una responsabilidad legal en la Misma, con un Canon, al respecto, en la Santa Sede, Católica.

    Porque es de las doce tribus e hijos de Jacob, y en sí cristianos en auto-reconociéndonos, aunque en maneras indistintamente por la diversidad en caracteres, qué lo es propio, de la nacionalidad y a como Tal en Iglesia, la establecida en justa, y acorde de éstos principios, y con sus valores primordiales, en Cristo-Jesús.

   Y así es, en haciendo también éste honor, a una de las propuestas en él, XIV Sínodo, de nuestro grupo sinodal, Conciencia Laico Cristiana, en nuestra Diócesis, Coria Cáceres, y de la parroquia, Santiago el Mayor, de Cáceres, en él que fui coordinador del mismo, y que dirigimos, entre otras tantas propuestas más, como lema de la misma: (Yo Soy, Cristiano)  

   ¿No somos así formando entre todos a las gotas de agua, y que colmamos él Mar, u las partículas del universo Infinito, células diversas e indistintamente etc., o incluso, “él germen físico y posible”, que se conjuga desde antes de todo lo existente con él Espiritual, u Divinidad, y así del polvo, o de las gotas formando el agua de la lluvia suspensa en las nubes y que se nos revierte de nuevo, en Vida, generación, tras generación?  San Mateo Cp. 24. Vs. 42 al 51. Y San Juan. Cp. 17. Vs. 20 al 26.

   Y los perros, qué no entrarán en el Reino de Dios, no son otros, qué aquéllos inhumanos, “hombre u animal”, él que muerde la mano, de quien le cuida y le da decentemente a comer en su diario lo más sustancial u primordial para conservación de su vida.

   Y los hechiceros, impuros, asesinos, los idolatras, y amantes de la mentira que malvadamente practican, no pocos ya, no son otros, qué aquellos endiosados en sí mismos inconscientes incluso algunos, de quien, les habita su “espíritu”, a cómo el arte u las obras de sus propias manos, y las de entre los hombres, que unidos les supera la fascinación, qué se auto-sostienen de entre sí mismamente por sus propios intereses en un círculo vicioso. Apocalipsis. Cp. 22. Vs. 15.



                                  Julio Barriga Carrasco.

  Y en La Confianza de mí Propia Fe en Jesús-Cristo Resucitado en Sí de Él, y así haciendo Su Voluntad ya hace Varios años, en Ésta, me Suscitó escribir Esta Oración de Agradecimientos, Al Dios Divino de Todo Lo Infinito en Su Santo Espíritu. La que comparto ya en alguno de los escritos mencionados, entregados, y registrados, pero no aún publicados, y que ya particularmente desde entonces junto con Las Oraciones en Divinidad También Suscitadas en Hermanas y Hermanos en Él Señor Cristo-Jesús, y que habitual y constantemente en él propicio de cada tiempo necesario y agradecido a Tal indistintamente de en cada Momento Preciso o él Adecuado, Oro, y se lo ofrezco Al Señor, Dándole Las Gracias, y Pidiendo Más y Más de Su Gracia Recíprocamente que recibo para Su Proyecto de Vida Eterna en Sus Hijos Queridos y Amados En Éste, Así Dice.   







      En Sí Él Espíritu Santo, qué me dice para todos los Santos, y Santas, esta oración Santa. 



Gracias Señor Jesucristo Hijo Único y Querido Divino de Dios Padre Creador Divino De todo lo Infinito en Su Santo Espíritu, Gracias de Nuevo Señor por mostrarme



Al Padre Creador Nuestro, y mantener mi Plena Libertad en Conciencia aún También



De éste Mismo Nuevo Momento, Postrado Ante Ti desde mí Gran Amor, y La Confianza



en mí Fe que Tengo Para que me instruyas a Tu Voluntad, En la Forma de Tus Preceptos



y de Tus Mandamientos, Porque Solo Así Y en él Calor de tu Inmenso Amor Y Misericordia,



Pueda Cumplir La Misión de Tu Mandato, que Es por Ti Dispuesto desde el Principio De Los



Tiempos, en Cada Una, y en Cada Uno, Indistintamente de Tus Hijas, e Hijos, qué como Tal



Quiero Voluntariamente y acepto yo La Mía que por Tu Gracia Divina me Corresponda



Llevar a Cabo En Tu Divina y Santa Gloria, Tal y como Era en él Principio lo Es ahora y



lo Será por Siempre, Gloria al Padre, Gloria al Hijo, y Gloria al Espíritu Santo, como Era



en el Principio lo Es Ahora y lo Será por Siempre y por los Siglos de los Siglos. Amén. 



¡Que así sea! Amén. Amén. Amén.

                                                 

                                               Julio Barriga Carrasco.





       Así Católicamente y con Éste Mismo Espíritu nace, Él Credo Largo como es conocido en Nuestra comunidad, Cristiana, Tal, como el Credo Católico, y él qué en Sí, y así en la confianza de mi Propia Fe en Jesús-Cristo me Profesa en Su percepción que me Alude, percibo y Creo. Y a diario lo medito en Discernimiento junto con Las Oraciones en Las que Creo y Vivo así Lo Profeso muy a menudo de Ésta Fe, y es La que me encarna.



   Creo en un solo Dios Padre todopoderoso,

Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible.

Creo en un solo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios,

nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz,

Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado,

de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; qué por nosotros,

los hombres, y por nuestra salvación bajó del cielo, y por obra y gracia

del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre;

y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato;

padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo,

y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar

a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo,

Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con él Padre y el Hijo

recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas.

Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica.

Confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados.

Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén.


jueves

¿Pero no es una gran Gloria?


¿Pero no es una gran Gloria? Qué en el acoger en sí, he, indistintamente y también de en cada cual, el que es si ves en sí, y delante de ti el guante del agravio, y el lanzado en su día entonces al suelo y qué lo Es también en mí caso, y en Sí, Espiritual, Cristiano Católico, y aún él que es pisoteado, y sin recoger por la barbarie descaminada e incesantemente sin rumbo, sin Alma, ya confirmada y aún la robada por él mal, y que hemos de acoger aunque indistintamente, cada cual, qué por la anterioridad del tiempo y en La qué le fue desposeída en Nuestra Reina Madre Familiarmente así en, La descorazonada, y en cada cual así por Tanto, y desde entonces mundialmente, y multiplicada pero, y solo por él mal instaurado en un hombre que como en cada cual está desde Jesucristo, en libertad y así, en justos, e injustos, incoherentes, prepotentes, cruel, y avariciosos violentos, e incluso, bélico y, Rey, qué en Enrique VIII, con su espíritu de litigios contradictorios entre sí mismo lo percibo encarando aún su constancia maléfica, y que en lo colateral, le fue el daño, y de entre otras tantas más, también, contra la Reina Catalina de Aragón, su esposa en acogida, aunque legalmente y en viudez, de su hermano, fallecido, y al que Dios ya lo guarda en Su Alma,  también, y La Abuela, e Hija de Reina, qué impotentemente fue utilizada, manipulada, increpada, y desalojada, pero robada también, y qué de nuevo, le revirtió el desamparo y mismamente también, a como su sobrina nieta, que en definitiva le influyó Espiritual e igual y socialmente, rehén, y la qué lo sufrió, y de la cual, premeditadamente, se le propagó con intención impura el error, y en él, confuso para los demás, y donde nos encontramos, qué en sí, es sin dudas en mí Alusión, Misericordia, puesto, qué La Vivo, y que La  Percibo en Cristo por Su Divina Sangre, y de Nuestra Madre del Cielo en, La Reina Isabel II de España, ¡“mi niña”, cuanto sufrió, y qué sola y perdida en su lucha incapaz.! Y como así lo es aún descendencia, en toda aquella prepotencia, qué misma e indistintamente, lo es usurpada en cualquier modo, despreciada, u también que en reciprocidad en la inversa, del mismo agravio, en él despreciado, que también, y de algún modo en sí, lo asumo, y aunque no dé violencia, es él qué lo “vivo en cierta manera y, entre incrédulos” pero que no comparto ésta su incredulidad que daña tanto, y tanto, en cualquier ser humano, por él desorden social, en los inconscientes, y avanzando en ello por atropello, y que lo discrepan incluso, cegados, y ensordecidos, pero qué lo es más, en las desmoralizadas, y a como bandera, en ella concretamente La nieta, que no se despega del Vinculo, y ni de la Amistad, Católica, por lo que fue de la disgregación, u escisión Cristiana, es deshonrada de entre dos aguas, y por consiguiente también utilizada, abandonada, desprotegida, o que incluso hoy, y qué también en ésta deriva acogida, y sí en violadas, y solas, así en agravándose más y peor, la propia situación de convivencias socialmente en el desorden absoluto, y en él que nos encontramos, y qué en sí, Es, y no menos, pero al menos consciente de ello, de él qué es, y que lo es pues en lo que me ocupo, y preocupo así y en sí de mí Misión, en Santidad, en la que lo es Tal, y también en damnificada generacionalmente, a como sí qué lo fue ciertamente y por consiguiente antecediéndolo en, La Reina Catalina de Aragón y qué, aunque custodiada y retenida con sus privilegios, pero en sí y a la espera, tan Santa y pacientemente en Cristo, y pidiendo Clemencia aún. Y Es por lo qué aludido, percibo cierto, él porque, donde hay Rey, no puede haber injustamente reina, sino que en Santamente Consorte, tal qué solo lo es, y ha de ser aún, en éste imperativo de Divinidad, en transitorio, y por la falta física del rey, y así en, tanto, de una Casa-Familia-Morada, u en común de la soltería parcial en Santo, o Santa, e indistintamente, de las clases, en éste privilegio social generalizado, o lo que es lo mismo, qué si en viceversa u apostatando, que es renunciar a tu alma, y que lo es entonces, sin posibilidad, e inconscientemente él qué se sostenga por mucho tiempo y ni así por tanto, (Gloriosamente en Su Reino) sino que  por contrario y si alejado o despreocupado, “en no digno u personalmente impropio, cada cual y si así aunque en pie y perdido, dependiente, de otro dependiente también, tampoco”, de lo Visible podremos prender a ninguno dignamente, a menos que un Alma Caritativa, y sí nos dejamos ayudar, aunque primero, lo es poniéndonos en paz consigo mismo, y después con Éste, que te Acoge, y te lo muestra, en Cristo, porqué lo es, Solo y Vida, Recíproca y con Él, en Él, y para Él,. San Lucas. Cp.21. Vs. 17 al 19. Epístola de Santiago. Cp. 4 Vs. 1 al 12. Epístola de San Pablo a los Romanos. Cp. 13. Vs. 11 al 14.

Por lo que en, Conciencia, Testigo soy en Cristo, y así trato de mostrarlo física, y Espiritualmente, de modo en él que así comencé, ya mucho tiempo en alusión, y qué percibo en tal, y qué tal cual, es en él que continúo, solo y concienciado, pero en Cristo, y acompañado de Su Santidad, con Sus Santos Mártir, u Redimido en Comunión Espiritual, los que murieron por Él y con Él, y qué en Cristo, lo Es Vivir Su Eternidad, porque en Éste Su Proyecto, lo Es Eterno en Su Hijo, Cristo-Jesús, y en Sí También Es Él. Y que haciendo su voluntad es cuanto hago, digo y expongo en Sí, de Él, en la propia medida de mis posibilidades, solo y hasta que Dios y Padre Nuestro Jesucristo así lo Crea en Su Divina Misericordia, y sí a Bien, en él concedérmelo, con la Bendición de Su Prueba, y que yo  percibo cierta y verdadera, porque algo Él ya me ha mostrado, pero que no la puedo yo mostrar aún, en la incapacidad, por lo devenido, en lo que he visto, he oído, y a Dios Gracias, he Vivido, y Vivo, por Tanto, en contando, cuanto me alude, u percibo, a como mí testimonio en mí Fe, de la Propia Confianza en Jesucristo-Resucitado, y Es Él, él qué lo mostrará en Sí. San Marcos. Cp. 4. Vs. 26 al 29.  por lo que es, en él caminar, e indistintamente. Porque Él Es Eterno, y Nosotros Sus Hijos Queridos, y que si así, en Él. Por Que lo Es en Su Palabra Dios, y en quien a Él La Porta, de Su Vida Gloriosa. San Mateo. Cp. 22. Vs. 29 al 32. Y así, como también Él Es, Él que nos la aporta mismamente en Sí del Amparo, a la Reina Isabel II, de España. Con gran elogio de Fe en lo que hace, y dice ya entonces, Glorificado por Él, D. Benito Pérez Galdós, qué en sí, y sin yo conocerlo, sino, mismamente así, por Tanto, de Su Testo-Divinidad, Vida suya, en Cristo.

En la mañana del 9 de abril de 1904, en su residencia parisina, fallecía Isabel II por unas complicaciones bronco-pulmonares producidas por una gripe. Sus restos fueron trasladados al Escorial para darles más tarde sepultura en el Panteón de los Reyes. Moría una reina y, como epitafio, podemos citar las hermosas palabras que Pérez Galdós, que la entrevistó poco antes de su muerte, dejó escritas sobre ella:

«El reinado de Isabel se irá borrando de la memoria, y los males que trajo, así como los bienes que produjo, pasarán sin dejar rastro. La pobre Reina, tan fervorosamente amada en su niñez, esperanza y alegría del pueblo, emblema de la libertad, después hollada, escarnecida y arrojada del reino, baja al sepulcro sin que su muerte avive los entusiasmos ni los odios de otros días. Se juzgará su reinado con crítica severa: en él se verá el origen y el embrión de no pocos vicios de nuestra política; pero nadie niega ni desconoce la inmensa ternura de aquella alma ingenua, indolente, fácil a la piedad, al perdón, a la caridad, como incapaz de toda resolución tenaz y vigorosa. Doña Isabel vivió en perpetua infancia, y el mayor de sus infortunios fue haber nacido Reina y llevar en su mano la dirección moral de un pueblo, pesada obligación para tan tierna mano».



Pues dicho en Su Santo Nombre esto, aquí lo tenéis y para ello, y también en Sí yo, en Cristo, él qué añado al respecto en, Conciencia, lo siguiente. Están preparados, reunidos al parecer todos los reconocidos científicos “globalizados”, y una gran parte, de farfulladores, políticos, y algunos nobles con respeto, en Sí y por Tanto, intentando mediar en razones de la Naturaleza Divina, y de la que consiguen, los otros, cuanto necesitan para encauzar las aguas siempre que él caso lo requiera, a sus ostentosos molinos, y que trituran cuanto se le vierte entre sus ruedas machacadoras, y así repartir algún que otro, ribero, para sus compinches y cómplices, y ni tan siquiera unas cantimploras de agua para él resto desatendido, ignorado, sino qué nos las venden con cualquier marca, a la paciente civilización y a precio, tal a como sus energías, y contaminantes, y las producciones incesantes de diversos y muy variados productos científico-artificial, y de aditamentos farmacológicos, etc. etc., así en multiplicándose los usos en exceso, a adicción, incluso en los mayores, y que aunque diferentes en éstos, pero no optante en  consumistas e innecesarios, en muchos de los casos, u al menos, no en tan saturados, u atiborrados, de todo éstos componentes en brebajes etc. Pues ya dicho está, y escrito también, en Cristo-Jesús Señor Nuestro Dios, veamos de entre todos ya, en adelante quien, o quienes llevan de nuevo las aguas, a donde quiere, en quien quiere, y para a los que quiere Él.

    Y qué a como También en, San Juan Bautista, predicando en un desierto inhóspito, en él final del antiguo testamento, Nosotros, en Cristo, y Ángeles del tercer Coro, del Nuevo Testamento, Espíritus Santos que Testificamos Mismamente y en él Mismo, a Su Reino, con La Ilusión de Éste también en sí, sin desánimo alguno La Continuidad, a pesar de los pesares de nuestros propios pecados, pero que no ya, a los que fuimos perdonados, por Jesucristo Señor Nuestro, de los de nuestros Queridos Padres, y aunque lo es en lo invisible, a lo Visible y en Sí, Nuestra propia Cruz Divina, porque, ésta Su Vida, es mi Vida en Cristo y asumida en Conciencia, Viviéndola Tal Cual, en Regenerando en Él, y a Su Agrado, que Es él mío También, en la medida de mis posibilidades.

    Y en inversa, de la Repoblación, si San Juan Bautista, finalizó el antiguo Testamento, Bautizando, y Convirtiendo a la atención de la llamada del Señor, y Su Espíritu Santo, en el desierto Inhóspito, ya y ahora lo es introducidos, aunque con los cuidados, u las precauciones de la beligerante, enredosa y tramposa jungla social, donde hemos discernir, en Cristo, Señor Nuestro, para en sí, y en Él Santamente Evangelizar. Amén, Amén, Amén.    



                                         Julio Barriga Carrasco.


sábado

El resolver en Cristo-Jesús, Señor y Dios Nuestro, La Eternidad de Jesucristo-Resucitado


El resolver en Cristo-Jesús, Señor y Dios Nuestro, La Eternidad de Jesucristo-Resucitado. Es el resolver en Cristo, Nuestro Señor, Por Tanto, Vida, en Él encuentro, y de Divinidad-Sensibilidad, Espiritual, qué se requiere en sí, y así de Fe en Conciencia, asumiendo su total confianza, para qué si en Él Mismo, por Su Reciprocidad y si a bien Remunerable, en él espíritu pobre y humilde, nuestro, a qué como tu confianza plena en que te ofreces voluntaria y libremente, y la que le llega de tu Espíritu en sí También de él qué, El Posee en Ti, de Sus Santos Espíritus, de Junto Al Padre Creador Nuestro Dios, Él te lo devuelve en Santidad y Paz, de Su Amor Infinito Gratificándotelo con La Misma, y en sí, de algún modo, u Divinidad, en La Correlación de La Misión Liberadora de Su Pueblo por Él, él más Querido y Amado, y qué de entre ambos, Habitan juntos y revueltos, y qué se asume en La comprensión, y La Paciencia, en Él Divinidad, porqué indistinta e igualmente correspondes a Sus Santos con bondad y humildad, y ha, qué si como en sí Es, él que lo Es por Tanto, del compromiso adquirido y qué personal y propiamente tú le hayas, o aun y mismamente, le continúes pidiendo, en La Misma Confianza, con Fe en Su Amor Infinito, y así de entrega en él Mismo, que es él darse en Sí a Él, y qué Lo Concibes, de Su Vida Eterna, en La que ya nos dio Él de Su Paz y Amor Misericordioso con tanta Bondad en Su Cruz Divina, y tras Su Resurrección de entre los muertos Glorioso, y para qué en la acogida También por Ti de Tu Prójimo ayudándole, y Al qué asemejas en sí, o ¡No! Circunstancialmente, y dependiendo, de la propia reciprocidad, si en negativa, u en sí para él Bien general u Familiarmente, de Continuidad, ya sin la discrepancia por medios, pero sí La Fe en Cristo, y en Éstos Es por Tanto, y así los testigos de ello, y que caminamos juntos, del que naces de nuevo Espiritualmente, y así, de la Madre, y él Padre, Santos ambos, en su Buena Cristiandad Católicamente, y Principios con sus Valores qué Es, y están Solo en La Conversión de, Vida Al Momento, y en Él, e indistintamente en Un Espíritu Santo, en Conciencia, qué hace Su Voluntad, a como Tal, y en la medida de cada propias y particular circunstancias, por Tanto en Conciencia, y de cada cual, porque La Misma, o se tiene, o ¡No sé tiene!, por consiguiente, parte y no más.

   Y La Pluralidad individual, y La Globalización Mundial, Familiar u socialmente, cualquiera que esta sea, sí increpante, de acoso, hostil, y máxime, si lo es en resultados malos así físicos, de crueldad e inhumanos, en algún animado espíritu mismamente sea y aunque en sí aún, de sí, no auto-reconocido en tal, pero qué si lo es violenta, incluso, colectivamente y de algún modo en énfasis liderándolo en tal animalada, u jauría, lo es, y lo será siempre y aún parte, y ésta, nada más, que de La Unidad-Dios. Un Alma, Santo Espíritu de Dios, que está en Todos y Cada Uno de Sus Hijos, porque Es Él Dios de Todo Lo Infinito, así, Su Reino y Querido Hijo Único Jesucristo, en La Tierra, u en Él Cielo, Es Él, él Todo Poderoso.

   Por lo qué y aunque en la inconsciencia, es el que, no nos tomemos a la ligera, las determinaciones y ni con tanta incluso, soberbia en la ociosidad, y él consumismo, porque todos tenemos un compromiso de vida, y por él cual el qué hemos nacido e indistintamente, y para en él discernimiento de sí mismo, en él reconocerte, También de Vida Santa, así en la mutua y constante ayuda, y ayudando a tú prójimo, pero en sí de Su Iglesia, Cristo-Jesús, en Real y Verdadera, y ésta, con posibilidad Real, de en, vivirla, efímera y materialmente, u en Lo Espiritual y Santamente, en La Eternidad de Cristo-Jesús Santo Espíritu, Evangelizados, y evangelizando así, Sumando y para Él, Santa y Familiarmente, a Su Agrado, Mutuamente Acogidos, y Dando Gloria a Jesús, con María Santa Virgen, y San José, él Esposo Fiel, con La Verdad de Jesucristo-Resucitado, en Sí, y que en la medida de lo posible, en cada una de la propia, e indistinta interpretación qué ha de ser a considerar en La Verdad, de Jesucristo, y qué generacional y mismamente así, y en la confianza de mi Fe, en Cristo, él qué nos han devenido en sí familiarmente y así en nacidos, en las familias de cada cual, y según de sus propias posibilidades, pero qué sin dudas, en Su Continuidad, y él qué lo sea en desarrollarla y cada vez más de lo continuo, para bien nuestro, haciendo él bien, y lo mejor posible, mismamente para así del Bien, y de la Paz Misericordiosa de Dios y Padre Verdadero, Creador Nuestro Jesucristo.

Con sensatez, y sí para bien, de todo aquel que “vive el deporte” y que si a como símil, del mismo, se pueda escudar, y para con él mismo también, el que lo sea en comprendiendo de algún modo, a La Vida, y a la muerte, y qué si se la juega, sepa que es de entre todos, y para ganar Vida Eterna en Cristo-Jesús, también, en que si lo es, juego, ¡que no lo es! por Tanto, tampoco, es guerra y ni muerte, sino entendimiento, en la Verdad, porque es ésta y siempre la que en el largo camino, gana al final, y como se puede comprobar por lo evolucionado en sí de la Convivencia, más real y que también, es en él, entender por consiguiente, él que nos enfrentamos fijo y así, realmente, y si no lo es enfrentamiento de “paz” sí a la otra parte en rivalidad, y por Tanto, y en Sí en la Confianza de mi Fe, o lo que es lo Mismo, en él ejemplo tomado, todos y cada uno, y así todas y cada una, hermanas, y hermanos, tenéis, y así, también como yo la tengo cogida, la raqueta del, Amor y La Paz en mis manos fuertemente, pero que no lo es claramente en sí jugando, en mi terreno propio, por Tanto, empuñadla fuerte en vuestras manos indistinta y firmemente, y para no perder, a lo que más se Ama. La Paz y Él Amor.

   Hace unos días, leí y me gustó bastante, por lo sencillo y clarividente que nos lo dio, en uno de sus excelentes escritos, que por otro lado, y casi como siempre, en su savia visión, u interpretación, y que a como gran historiador, y buen creyente también, evangélico, y al que aprecio desde qué lo conocí, escuchándole, en la Cope, con D. Federico Jiménez Losantos, y aún ahora de vez en cuando en, mí perfil fe facebool, le leo, u escucho, como es D. Cesar Vidal, y sobre todo, en él final, de éste escrito, titulado, Marcos, un evangelio para los gentiles, del día 17 de noviembre, de éste 2019. Y qué para la reflexión del contenido que nos ocupa, o incluso, preocupa a no pocos, y que me perdone D. Cesar, si le molesta, el que disponga de éste corto reflexivo, que os expongo a tal fin, y del mismo, él que nos dice. Dentro de lo esquemático de la descripción, Marcos ofrece una reflexión extraordinariamente profunda.  Jesús podía no hablar – Marcos suprime sus palabras más que conscientemente – pero su cercanía provocaba reacciones.  Igualmente, hoy en día, podemos escuchar más o menos a Dios, pero, lo hagamos o no, siempre está ahí y siempre se puede percibir su acción.  Ante esa realidad, hay quien deja que Dios transforme su vida porque reconoce lo diferente, lo tremendo, lo sublime.  También hay quien se cierra y apunta a las apariencias, teóricamente, innegables como que Jesús había fracasado o que Dios tolera el mal o que no hay salida en nuestras vidas.  Finalmente, están los que no ven razón para pensar que nada vaya bien, pero, a pesar de todo, se mantienen fieles.  Contra toda esperanza, quizá incluso a distancia como aquellas mujeres.  La cuestión es, en medio de las dificultades, dónde está cada uno.

   Y que en sí yo, personal mente, Cristiano Católico y en Cristo, el qué es en Conciencia, que percibo, a San Santiago él Mayor, y a su Vez también, a San Pablo, como que me aluden y los defino muy en concreto mí, Morada, en Cristo, por Tanto, del Evangelio de San Juan. Cp. 20. Vs. 4 al 8.



                         Julio Barriga Carrasco.

A Dios siempre Gracias sean dadas, y a Jesucristo Su Único Hijo Querido y Divino de Todo Lo Infinito en Su Santo Espíritu, por siempre, y por los siglos, de los siglos, Su Gloria, Amén.


A Dios siempre Gracias sean dadas, y a Jesucristo Su Único Hijo Querido y Divino de Todo Lo Infinito en Su Santo Espíritu, por siempre, y por los siglos, de los siglos, Su Gloria, Amén.

   ¡Espíritu, somos!, y sí en él Mismo, te sientes Santo, lo Es en ti también en labrándote Él a Su Semejanza, en Cristo y, por Tanto, si como yo, y en sí, Consciente de ello, también, él qué serás Tú y para hacer Su Voluntad, por Su Gracia Divina, en Ti, Un, Espíritu Santo, más y que cuenta en, Él Reino de Dios. Él, Único Reino de Paz y Amor Misericordioso Siempre, del Espíritu Santo, en sí de La Verdad, así que lo Es, Resucitado contra él pecado, en, Tu Alma de Libertad propia y autónoma en Él Mismo, y Es en La qué Quedas Libre, ya en Él Señor Nuestro Jesucristo, si Paciente, Humilde, Caritativo, Compasivo y Bondadoso en, él Bien General, él que la encuentras, en sí de, Tu Reino Propio, u, Misión Mismamente, en Él a Su Propiedad, y así entender también La Suma en, Cristo-Jesús qué Redimido Generacional y Familiarmente en la Conversión de entre Los Conscientes y así, de entre, Padre, e Hijo, y éste Más, el que lo Es, del qué Regenera en, Él Mismo, y Ambos, Mismamente de La Divinidad-Amistad, u Vinculo de Conversión, Continuada, y a la par en él Compromiso, del uno con él otro y en él total de los días u él momento propicio, de en cada momento concreto, y por el Devenido en Conciencia de tu Bautismo Cristiano, qué Es a como él regalo de Salvación, él más preciado de todos, y Conscientes en Tal, así Generación, tras Generación, te Lo dieron, a como oportunidad, por Tanto, y Mismamente, tus Padres también a ti, libres y voluntariamente, y Tanto así, que lo Es de Su Reino, y Los Devenido También, en él de la Tierra, de lo Visible, como en él del Cielo, en lo Invisible, y qué Crees en Él Señor, Dios Nuestro Jesucristo. Amén, Amén, Amén.

   Por lo que aludido, y en percepción de Su Reciprocidad en Sí, no ha de ser, en Cristo-Jesús, Señor Nuestro, tampoco, u al menos, en España, cambiada en ni, un ápice, o tilde, Tampoco de, La Constitución Española, porque Es de La Fe Latente, La qué libres y voluntariamente nos dimos los Españoles, los Leales, y Fieles, que antes de que todo lo de hoy sea lo trascendental u momentáneo, ya lo era del Señor Jesucristo, y como así costa en la Misma, y que Surgió así y Mismamente, por los Mismos que así, en Enmarcándonoslo a Cómo Españoles Constituidos Libres, en Él Señor, y así También aceptado y Comprometido, en el Reino de España, qué en Él, Lo Es él Mismo, al de Dios, porque Solo Puede haber Un Rey, y Éste, Solo Dios, Un Alma, en Jesucristo, Cristo-Jesús, Él, que Lo Es Por La Gracia Divina, Es en Su Semejanza Hecho Hombre, y así también, por lo que fue muerto, y También, Resucitado, y en Cuerpo y Alma, Mismamente y así, Es Ascendido Al Cielo Junto A Dios Padre, Nuestro Creador Divino de Todo Lo Infinito en Su Santo Espíritu, Su Reino, en Su Santo Espíritu. El Santo, De Los Santos, y De Los Santos, Nosotros los del Tercer Coro Angelical. Y qué en, Santidad-Divinidad-Sensibilidad, Es él Ser en Él, y así personal e Indistintamente de cada cual ya y desde entonces Nacidos en, La Iglesia Santa de Jesucristo, por lo que generalmente Tampoco, se está viviendo socialmente si en la oscuridad aún perdidos y sin rumbo, de Paz justa y Verdadera, en lo Cierto y Real, así entre nosotros todos, a como él Reino qué en La Tierra en Conciencia y Percepción, ha de haber, y sí que lo Es ya en sí Glorioso así también él Tal, y él qué así conste a como Tal en sí, y para él Padre Creador en Gratificándonoslo con Su Continuidad indistintamente de cada cual en Creyentes que sumamos para Él, y en sí, él qué genética y físicamente también lo es en el Transferido-Divinidad, devenida de, él Nuestro, qué en él deseo e intenciones Misericordiosamente y, Orando en La Constancia aunque de lo posible dentro de mi propia circunstancias, Providencial, a qué, sume en, uno Más, en Su Morada-Familia, y Mismamente en Tal, De La Paz También, a La que en Sí, paciente y bondadoso de entrega, él qué La Percibo y La Vivo en mí Fe, y a Tal, Es él qué incluso no pueda ser, ni aunque quieran colocar, y lo sea en encajándolo, u apoyándose de nuevo en él error voluntario concupiscentemente, del pecado y sin corregir, Nacionalmente incluso, agravándolo aún más, con la renombrada precedencia en suma de lo incorrecto, y ya también para olvidar con buenas Intenciones a los errores diversos, pero guiado de La Fe en Cristo, a tan muy conocida por lo sistemática u religiosamente así mal utilizada, aunque impuesta, o aceptada en su día en si resignados como perdedores, o refugiados en Indistintas Iglesias, pero solo, él qué lo sería irrelevante de continuar aún y, en él empeño así hoy también, social, u gubernamentalmente y aún de manos en él seguidismo propio de lo retorcido que fue en él frio acero, y por lo violento, nombrada cómo de eficiente Reina en la tierra, y de algún modo, porque él que se la nombró tal y así, él  que aún continua en la Nación, en contracorriente y tan consabida, pero que sus frutos, son los que serán, sí En Cristo Es, los que así se han de mostrar en él Mismo, y solo por los hechos Verdaderos Propios del Mismo, si lo es, o no, para poder encajar a la idéntica imitación terrena, o no así en idolatrar, que es al parecer la nueva iniciativa, y la vereda tomada también, en Nuestra España, y a la que de nuevo, y en, las mismas decadencia y principios, es ya con los precedentes históricos tan negativos, pero sí También es qué desarrollados cultural e indistintamente, en más fortalecidos qué a Tal la exigencia de lo primordial está nada más, qué en manos de lo personal, que es lo que hayamos conseguido reunir en sí Mismamente, y así, él discernirlo en él Propio Compromiso, para él bien Nuestro, y porque Él Mismo, Es él de Dios Señor Nuestro, Jesucristo, en Nosotros Españoles Constituidos, y desde los Principios del Reino de Dios, y también, por él enfrentamiento, de entre hermanos, qué generacionalmente en división u separación negligente en cuales, tan innecesarios, pero qué son los que por la misma, sí qué se puede entender la Fraternidad Familiar Mundial, y en la que ya fueron los confrontados, y ejecutados de entre Españoles, e Ingleses, sí Eroperizados también, u internacionalizados y Mismamente, en La Globalización de La Civilización en, La Paz Verdadera del Misericordioso Amor de Dios Padre, en La mediación de Jesucristo Su Hijo, qué entre Nosotros en Cristo-Jesús, y Su Espíritu Santo, Gozamos del Santo Espíritu de Mismo, y aunque a como la señal negativa, y que lo fue y avanzaba aún el esparcimiento del exterminador, por consiguiente, y sin justificar a la Verdad u a La Razón de Ser, o no, en decapitando éstos últimos, a los Mismos Principios Cristianos Ingleses, y más concreto, con la propia cesta y la cabeza recogida en la misma, que lo Es en Santidad, “La Cesta, u Morada en la Cabeza”, de Santo Tomás Moro, por Tanto, qué Incluso, y si no hay corrección al desagravio físico hoy, del Pasado en Todos los Tiempos, él que, por contrario, y sí que lo Es Santo, y aun que Totalmente en discrepantes hoy también, pero como para que no se repita más u de nuevo en Tal a la distorsión de en más confusión e indistintamente, y qué en sí Es, en Conciencia, él qué Es nada Más y Solo con La Permanencia de Validez Divina, y qué Solo Dios lo Juzga con La Vida que nos Da, u nos quita, pero que Camina Eternamente en Él La Santidad Espíritu Santo, de un Nombre, Jesucristo-Resucitado, y en Él Divinidad-Nuestra, de Éste Su Reinado en Cristo, y Qué en María Santa Virgen Divina y Esposa, porque Es Madre de Jesucristo, Dios Nuestro, y del qué Es Su Reino de La Tierra, en Cristo-Jesús, y así en completándonoslo Él, Familiarmente, lo Es Unidos así Santamente entre Sí, y en Santidad, Hombre y Mujer, La Sucesiva y Sí Espiritualmente él qué lo Será con Nuestra Madre Del Cielo, que Es en sí, Él Modelo de Santo, y Santa, u Santidad en Tal, y qué en la confianza de mí Fe, y aludido en Esta Percepción, de Reciprocidad en Él Amor Verdadero, y de La Paz, Gloriosa, así de Conciencia y Viviéndolo, Tal como así lo Vivo, Vivo, ¡Sí!.    

   Y no será por Tanto posible, y ni podrás hacer volar a una cigüeña, y ni a un solo gorrión, ni al águila, y ni a la lechuza, ni al Buitre, incluso, de una foto, u en sí de escayola, y ni tampoco él que se posible que un animal te gobierne, o que un perrito te hable, y ni que él te cuide, a como si en cerrados y entre sí del, Mundo, en una única compañía de resignación por la desconfianza perpetua que solo tú, no abandonas, y que le das poder a que te domine como si éste fuese también el eficiente y en el sentido único, de la confianza, y de la verdad, ¡no!, ¡error!, y ni cómo tampoco qué un gigantesco Buda, y quienes lo motivan, fabricado por manos de hombres en sí de cuantos se dejan hipnotizar, e idolatrados aún, que incluso, no surte tampoco en quienes lo apoyan, así estatal u gubernamentalmente, e indistintamente cómplices, e idólatras y no, menos, y para así, ni el que te dicte nada, y él que pueda salvarte, aún menos, ni como tampoco una piedra en sí de  material, lo puede hacer, y ni así espiritualmente, a no Ser en La Conversión del Señor, porque es materia, y aunque todos hijos de Dios, no son ningunos de éstos cuerpos físicos, dignos de una posible santidad, y ni evolutiva, jamás, sino, caduca, u  estática, pero si convertidos en inanes espíritus, y seguidor de nada posible, u también en homicida, si es en él fomento oscuro y constante en la intriga, de los violentos, porque éstos, se auto eliminan entre los mismos, y por lo natural, lo es en su descalificación, marginados, u por eliminación física y de entre sí, más pronto que tarde, por la falta de conciencia, y en su momento le es inexistente, pero sí con la auto estima del bautizo, como la liana de salvación a qué asirse, y no más qué movidos por la fuerza oscura del mal, que les absorbe desde ambos extremos oscuros, y por consiguiente, el que les predomina en éstos, su fuerza natural causa del miedo, en la ignorancia, y por lo que no luchan, mantenidos en, pos bloqueados, grokis, porque ésta lo es atrevida e ignorante total, pero llenos de inocencia sucumben, para La Verdad en Cristo-Jesús Resucitado, y en Su Santo Espíritu de Dios. Es Él, y Nuestro Padre, ¡Creador La Vida!  

   Mirad y entended, que ni todos los hombres en sí, son hombres, aunque sí varón, y qué ni todas las mujeres en sí, tampoco lo son mujeres, pero hembras sí, y sin dudas, porque lo es en él linajes también distintos, y a discernir, de entre hombre, y mujer por tanto, y lo es e indistintamente, a discernir mismamente, por los hechos qué en el transcurso del tiempo y del contenido en él camino, los corroborará, o no, por lo qué unas, y otros, los son mejores, u aún peores de lo que tu solo puedes ver, y es en sí de entre éstos, donde mutuamente por él encuentro entre sí del Mismo Amor, se descansa en Vida Saludable, de cuerpo y Alma, y por supuesto, porqué motivas de sí, en tu prójimo, y en viceversa, de la Misma Reciprocidad, pero por él de más y Verdadero Amor, del qué lo ofrece de Corazón y Puro, que es quien Enamora, aunque espíritus y en libertad en sí, todos los somos, pero de cada cual, él propio y correspondiente al suyo, y en los de la oscuridad profunda, muy distintos son, y sobre cogedora es la diferencia, y así, en la misma confusión, lo es en él que se vive hoy de lo efímero inconscientes, de La Verdad del Amor que Es él que se nos adhiere en Divinidad, y la que si lo observas por la calle, en a cómo, quién es, quién, y de entre si juntos y revueltos, por ejemplo, cuando caminan juntos, o corren, bailan, discuten, u se pelean incluso, de entre confundidos y así en él mismo alborozo que los mismos concentran, llamando a la atención, y veras a la perfección los polos, invertidos, y contra opuestos entre sí, y porque, el qué en sí somos y los conciudadanos, devenidos para qué hoy, y si en la Luz, y en Cristo, a otra oportunidad Espiritual, Vida, y ha sí, en Santidad, o no, y así él comprender, o no, libres y voluntariamente, en la indistinta orientación, qué en la salida del Sol: está el Bien, y que comienza en cada día previamente, y siempre en él Alba, con una buena señal de bienvenida y descifrándonos algo en positivo del Verdadero Amor que estas encontrando día, a día, en sí, y para con los demás, pero, porque lo ves de nuevo, y te alegras en sobre manera, por lo que es nacer, y en Sí, del Bien que has mamado en Tu Familia, y así en el momento, de cada momento, y desde la pura niñez, la infancia y juventud creativa, y con Ilusión, y en la madurez claramente, ves, a la izquierda confundida y discrepante incluso, aunque libre, pero qué en él Mismo Caminar, del día, a día, éste, en el qué te rehaces, a un proceso sucesivo, y que constantemente nos rota, y que nos subes hasta lo alto del medio día, que nos sitúa y con alguna probabilidad solo, a de estacionalidad temporal, en el qué disfrutas en “centrados cómo endiosados, y en lo más alto incluso”, y para que así, en él mismo proceso en refinándonos aun más, sucesiva y naturalmente del Mismo, el que nos vamos asentando en, él ocaso intermedio, a un mejor entendedor de algo, y de en la Luz interior de sí, y de, él Bien natural, qué se te adapta en la madurez que se adquiere por la bondad y la humildad con una cierta plenitud, e incluso más, con la veje, savia, a la derecha, de la derecha, del Santo, y de la Continuidad que Es La Devenida Solo, en Cristo-Jesús, como para saber ya, él qué, a partir de éstos ambos extremos, de Luz y así Gloriosas aún, y que Te llega, o no, sabiéndolo por Tanto, de la posible Sabiduría en Sí adquirida, de Los Santos, en Cristo por Tanto, y él qué lo es nefasto, si al entrar en la ceguera de la noche, y en la oscuridad, Misma e incomprendidamente, y así dé por la falta de Paz en consecuencias de esta negligencia voluntaria y personal, y se encona, por lo que el peligro y así constante, acecha, y contra ataca en sí mismo, pero así y “ciego, chocando contra todo”, y contra todos, y sin posibilidad de seguridad alguna y ni en ninguno ya, de los sobrepasados extremos éstos, y que en sí, los definidos entre éstos mismamente, a cómo de extrema oscuridad del mal, o la noche del delirio, perenne, ocioso y concupiscente, porque ahí en los extremos, extremados y empecinados entre sí, viciados, ya ni a izquierda, y ni a derecha, son en tal, saludables los múltiples encuentros, y ni amables, ni parciales, ni amigables, ni encomiable por supuesto, si no, qué en soberbia, y desorden en la propia autoridad, así desordenada por desestimada en la tal, y así los unos, por más, y los otros, por menos, en sí mismamente sucumbe sin, La Conversión Al Señor de Todo Lo Infinito. San Lucas. Cp. 12. Vs. 35 al 48.

   Espíritu Somos, y en sí, Todos en Dios Nuestro Creador Divino de Todo Lo Infinito, y A Su Imagen y Semejanza en Su Orden Divino, y así Es qué en mí percepción, y como ya lo he escrito antes, en los anteriores escritos, en Definitiva, Es Un Nombre y en Todo, y en Todos, Siempre, Cristo Es, Jesucristo Nuestro Señor, por lo que en Sí También y en Cristo-Resucitado, Es en Él Emérito Papa, (Benedicto XVI, Morada, u San Pedro, en su Propio Nombre, ya con Su misión cumplida Gloriosamente y Satisfecho en Cristo-Jesús, Viviéndolo), y él que en Su Primicia de éste tiempo de Gloria, lo goza en Sí de Su Padre genético Familiarmente, y así en Sumando Gloria, del Padre Espiritual, y él que le aludió a Él de Su Nombre, a como él Hijo, Único, por, San Juan Pablo II, y que así tomado, lo fue ya en Él, y en Cristo, Su Espíritu Santo, que lo Es en Sí, y Mismamente en Él, y entonces, de Su Misión, aunque del Imperativo Divino, Cristo, qué Es en él qué en Conjuntándolo con, Papa Francisco, que en Conciencia lo asume en La Continuidad y Caminando, en Cristo, Señor Nuestro, También y Católicamente, qué en Tal, Es La Morada Santa, qué Es en Sí de La Santidad, y en Sí, de La que percibo en alusión, el que Es La de entre todos los Santos en, Jesús-Cristo, Su Santo Espíritu Dios y Señor Nuestro, y así Él de todos los Santos, del Cielo, y de la Tierra. Y Su Reino, y así, Él Rey de Reyes, Jesucristo-Resucitado, en Ti, aunque Suyo eres Redimido-Adoptado, y sí así, él que lo Es, Por los Siglos, de los Siglos, Amén, Amén, Amén.

   Y por lo que de la “misión” propia y a la que ignoramos, u qué despreciamos, incluso, el qué lo es con superioridad altaneramente, y aunque sujetos de alguien en una gran mayoría casi siempre, y también implícito así, el que lo es en el inmenso funcionariado universal u mundial, en lo que indistintamente y al respecto, de en cada cual el propio, y por supuesto, de él concursado, y aunque de alguna manera más es en lo Correcto al Agrado de Nuestro Señor Cristo-Jesús, de entre los que así se sienten servidores en la entrega total, y de corazón Puro, que son la diferencia real, y los Leales que más corresponde a la Libertad Verdadera, en siendo servidor y gozosos de, Dios, para La Paz del Amor Misericordioso Espiritual qué perdona y siempre, a La Verdad, dando Vida Nueva y Renovada, en Cristo, Señor Nuestro, Jesucristo, y con respecto, a éstos otros en la incredulidad, qué en la discrepancia absoluta en casi, de todo, y qué aun siéndolos en discrepantes habituales, es en mí alusión a tal, qué los percibo, en no menos a las “aves migratorias y común, aún todavía buscando un bien estar que no encuentras, de manos del sistema legalmente constituido, y en el que no se reconocen, y ni entre sí mismamente de éstos, y por lo que tampoco en su “misión vida de todos”, pero, debido a la, (coctelera inmensa y de creación tan retorcida, en el mal lucrativo de lo ajeno) que nos hemos, auto-creado socialmente endiosados en gran mayoría entre, unos, por poco, y otros, por mucho, y algunos apóstatas, aún inconscientes de ello y en tal, qué en avanzando con la venda en los ojos, tanto, o más, suicidas, a como las acometidas huidas efímeras del frente que obligados en gran mayoría, y entremezclados a ciegas, los unos y los otros, y que lo fue por enfrentamiento bélico, despreciando de algún modo, a la vida, unos, y robándosela, a otros muchos, y de los mismos sucesos que pasaron, a Dios Gracias, en la primera, y segunda guerra mundial, a como él ejemplo ya, de lo que no se ha de hacer, y ni fundar más iniciativas de ningún tipo a como tal, nunca más colectivamente a en tales historias y ni en semejanzas en el sinfín de, La Vida que lo Es Eterna, de Su Santo Espíritu, y qué en Sí, y en la confianza de mi Fe, pasadas están por Tanto. San Mateo. Cp. 6 Vs. 22 al 34.

   Soy un Católico, y en la diócesis a la que pertenezco, un sinodal, y aunque en él concubinato familiarmente, aun soy adorador, de la adoración Nocturna Española, y adorador, registrado en la capilla de Fátima en Cáceres, de la adoración perpetua, y que ya en sí, no la considero perpetua, puesto que al cortarse, la misma, y para la realización de obras en él Templo de la misma, y sin la previa restitución a Tal fin en poder continuar adorando al Santísimo, y como así, si qué se propició, en el Colegio de Las Josefinas Trinitarias la propia capillita del mismo, y para la continuidad de las Santas Misas correspondientes de cada día, y de la Parroquia de Fátima. Aunque las obras por lo que se acometieron, continúan, al menos ya estamos de nuevo los adoradores habituales, adorando al Santísimo, en la Capilla, y aunque el defecto existente aún en ésta continua, tal cual, incluido la inexistente aún también del alumbrado en las escaleras de acceso, y tan peligroso, para cualquier persona, por la noche. Salí, de la misma glorificado, pero indignado al mismo momento, de encontrarme insitu, a una señora mayor, penando, para poder avanzar en la oscuridad por las susodichas escaleras a las doce de la noche, pero problema que no es nuevo, y ni de ahora, y lo expongo por la aparatosidad de, a con que las obras se están acometiendo. Y así, un alumno del segundo año también, de la escuela de cofradías, y hermandades, y cofrade, de la Cofradía de La Sagrada Cena y Nuestra Señora de La Eucaristía, y mismamente, de la Virgen de Guadalupe, de La ermita del vaquero en Cáceres. ¡O sea que diocesanamente, tan Integrado! Hace ya algunos años, y estando apaciblemente durmiendo, me despertó, un a voz interior, que me dijo, despierta, que es la hora de tu descendencia. Y en una, o dos noches, vuelvo a escuchar a la misma voz diciéndome, reúne a las doce tribus. Y anoche ya día 23 de noviembre, y entre dormido, escuché con una voz más suave, a la anteriormente, expuesta, a mi padre, nombrar mi nombre, a como cuando me llamaba, en el hospital, cuando estaba ingresado, antes de fallecer, éste 28 de agosto y de este 2019. Apocalipsis Cp. 19 Vs. 10.                            



                            Julio Barriga Carrasco

  

  Y en La Confianza de mí Propia Fe en Jesús-Cristo Resucitado en Sí de Él, y así haciendo Su Voluntad ya hace Varios años, en Ésta, me Suscitó escribir Esta Oración de Agradecimientos, Al Dios Divino de Todo Lo Infinito en Su Santo Espíritu. La que comparto ya en alguno de los escritos mencionados, entregados, y registrados, pero no aún publicados, y que ya particularmente desde entonces junto con Las Oraciones en Divinidad También Suscitadas en Hermanas y Hermanos en Él Señor Cristo-Jesús, y que habitual y constantemente en él propicio de cada tiempo necesario y agradecido a Tal indistintamente de en cada Momento Preciso o él Adecuado, Oro, y se lo ofrezco Al Señor, Dándole Las Gracias, y Pidiendo Más y Más de Su Gracia Recíprocamente que recibo para Su Proyecto de Vida Eterna en Sus Hijos Queridos y Amados En Éste, Así Dice.   







      En Sí Él Espíritu Santo, qué me dice para todos los Santos, y Santas, esta oración Santa. 



Gracias Señor Jesucristo Hijo Único y Querido Divino de Dios Padre Creador Divino De todo lo Infinito en Su Santo Espíritu, Gracias de Nuevo Señor por mostrarme



Al Padre Creador Nuestro, y mantener mi Plena Libertad en Conciencia aún También



De éste Mismo Nuevo Momento, Postrado Ante Ti desde mí Gran Amor, y La Confianza



en mí Fe que Tengo Para que me instruyas a Tu Voluntad, En la Forma de Tus Preceptos



y de Tus Mandamientos, Porque Solo Así Y en él Calor de tu Inmenso Amor Y Misericordia,



Pueda Cumplir La Misión de Tu Mandato, que Es por Ti Dispuesto desde el Principio De Los



Tiempos, en Cada Una, y en Cada Uno, Indistintamente de Tus Hijas, e Hijos, qué como Tal



Quiero Voluntariamente y acepto yo La Mía que por Tu Gracia Divina me Corresponda



Llevar a Cabo En Tu Divina y Santa Gloria, Tal y como Era en él Principio lo Es ahora y



lo Será por Siempre, Gloria al Padre, Gloria al Hijo, y Gloria al Espíritu Santo, como Era



en el Principio lo Es Ahora y lo Será por Siempre y por los Siglos de los Siglos. Amén. 



¡Que así sea! Amén. Amén. Amén.

                                                 

                                               Julio Barriga Carrasco.





                                          




    Así Católicamente y con Éste Mismo Espíritu nace, Él Credo Largo como es conocido en Nuestra comunidad, Cristiana, Tal, como el Credo Católico, y él qué en Sí, y así en la confianza de mi Propia Fe en Jesús-Cristo me Profesa en Su percepción que me Alude, percibo y Creo. Y a diario lo medito en Discernimiento junto con Las Oraciones en Las que Creo y Vivo así Lo Profeso muy a menudo de Ésta Fe, y es La que me encarna.



   Creo en un solo Dios Padre todopoderoso,

Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible.

Creo en un solo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios,

nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz,

Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado,

de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; qué por nosotros,

los hombres, y por nuestra salvación bajó del cielo, y por obra y gracia

del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre;

y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato;

padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo,

y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar

a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo,

Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con él Padre y el Hijo

recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas.

Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica.

Confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados.

Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén.




Comprometido Electoralmente


Comprometido Electoralmente También, éste día, 10 de noviembre, en sí por necesario, Tal, como ha de ser en cada cual, libre y voluntariamente, y porque nos corresponde indistintamente en lo familiar identificarnos en, donde estas, de lo escrito y dicho al respecto por mí también, así en, Conciencia Española. mi blog.

Porque, en definitiva, en la confianza de mi Fe, cierto en sí Es, qué escrito y dicho está todo, en él antiguo y, él nuevo testamento, e indistintamente desde entonces, Sus Hijos los somos en Continuidad, y aún, evangelizándonos, generación, tras generación, ya tocados e Inundados en Sí Con Su Espíritu Santo, puliéndonos, acrisolándonos, y así, en el qué te sabes, te sientes, y Vives Propiamente en sí, a Un, Hijo de Dios, por Jesucristo adoptado, Redimido en sí también por Tanto, él qué aludidos Es, Solo Divinidad, u Amados De, Él Señor, En Cristo-Jesús, Él, Mismamente y Uno Más con Él, pero en tus propias circunstancias. Amós. Cp. 6 Vs. 1, 6 y 7. San Lucas Cp. 16 Vs. 28 al 31.

   Y es en la confianza de mi Fe, y por la Misma así en, Cristo-Jesús Resucitado, y en la satisfacción por la propia experiencia en sí, de, en Él, Tal a qué es en la que Vivo confiado en Su Amor de algún modo, desde siempre, desde pequeño, Viviéndolo, y qué es en Él sabiéndolo ya en sí, mayor, y Concienciado aún más, él que digo también yo, Él, Es el Único Señor y Nuestro Dios en Jesucristo Su Hijo Eterno Espíritu Santo, por los Siglos, de los Siglos, Amén. Y digo también por Tanto, Amado en Su Santidad qué, entre tantos muchos más es, el que lo Es También claramente en muchos de Su Santidad, y más, o menos parecido y así en percepción suyas, aunque por latente e indistintamente de la de en cada cual de su misión, realizándola, y lo es en muchos más, y más aún, en la qué propia y mismamente en sí de éstos y con ésta Vivencia de Fe, humildes, y gozosos porque lo Es no más en definitiva, voluntaria u recíprocamente, al hacer Su voluntad, y qué concuerda, porque la hacen constar, donde quiera que ésta le sea inminentemente encomendada, al qué lo Es en Divinidad, u Espiritualmente sí aceptada en sí, y es, el qué le sea concedida de Su Gracia, en Vivificando Su Reciprocidad, o sea, caminando aunque indistintamente y en Suma, para Él, y de Su Reino, que crece, y crece, con cada puntual e insignificante que parezca, pero qué sí en porción, la levadura, entre la masa correspondiente y que se adhiere al Mismo es en Victoria, y también mismamente, por él hecho consumado en sí, y así en mi caso concreto, y en sí muy particular, que Es al qué en caminando y no más, y ni menos tampoco, qué en encomienda a como Misión, y Tal la mía propiamente, ya en Conciencia tomada y aceptada, porque Él Señor Nuestro, Jesús-Cristo, la hace por mí, en Cristo-Jesús, Espíritu Santo, y Su Santo Espíritu me Alude, por Tanto, en desarrollándola, y con los hechos de mí realidad Viviéndola en Él Señor, él qué lo Es mismamente, Resaltándolos en Sí, y por quien también lo ve, de mí moderación personal en tal la acción asumida, que en la medida de mis propias posibilidades también, en formas, y maneras de hacer en sí pacíficamente, la bondad leal de Su Paz, pero siempre aprendiendo en Él, y de Él, y en los demás cada día, de donde También, lo Veo a Él, de Su Espíritu Santo Mismamente, que se me muestra, Tal, en él qué personalmente sí que acoge, y comparte, sin pedir nada a cambio, más que en él compromiso también, y de Su Verdad, porque la Verdad, solo tiene un camino, así La Luz que me guía con Su Bondad y Caridad Espiritual de Su Misericordia Gloriosa, y de Su Paz Amor, la que Él desea para Gloria Nuestra, y qué si en Sí lo Es de Gloriosos, y así, Es, el qué nos La Muestra, y así y en sí de todos Sus Testigos, pero eso sí, y si así, sea más, en sumando y atendiendo también así y a como ya es sabido, y demostrado en tantos, y tantas hermanas, Santas, y Santos, en Él, Moradas-Familias, Santas, y aunque libres, pero en sí e indistintamente de conscientes, y no, para nada en esclavo, de nada, y ni de nadie, si vive libremente, ni incluso debieran serlo, en éstos los que voluntariamente y dé entre todos en general libres así, se cuenta un gran porcentaje mismamente que así se sienten y en él exceso presumen, aun sabiendo que esclavo, es todo aquél pecador de sus propios pecados cometidos por éste, porque de los de nuestros padres, y antepasados nuestros, ya en Cristo y, a Dios Gracias sean dadas siempre al Mismo, qué sucesivamente así y hasta Nosotros, nos liberó Él con Su Resurrección Mismamente, y en Sí de Nuevo al nacer, de mí Madre, y de mi Padre, y de antemano en Él por Tanto, y que si así, y en sí creyentes, el que lo sea clara, y expresamente, en consciente dé querer, u estar atentos, y en Su Orilla-Morada, de entre Estas en Sumadas. Porque sin dudas, así, y de lo que me toca más en lo particular y en Sí comprometido, es mostrar y demostrar Esto, como lo Vivo humildemente, de laico u, en lo seglarmente, y dentro de la Santa Iglesia Católica, así y aunque en proporción e insignificante del pueblo llano, u conciudadano, pero propia e indistintamente, con, y dé él, día, a día, de su Gran Amor y en Tal, La Gratitud, de lo que por Él me Es así recibida Espiritualmente, o sea, qué en lo posible y también, en la gratuidad de lo recibido en sí, y que así mismamente lo entrego revertido yo de lo que nos da Él, en Dadivas, y así lo es aceptando en sí de, Su Verdad, en la cual y en Conciencia Creo, y así, tan cercano, u Familiar, porque lo Es Espiritualmente y Verdadero en Sí, exponiéndolo y para qué, lo sea también, en Nuestro bien general en Paz Justa y Leal al Amor-Verdad.

 Y así lo Es, pese a quien pese, y aunque sabiéndolo yo mismamente nada puedo hacer por sí mismo, más, qué en lo que pueda u sea capad de influenciar en los demás a Ésta, en Su Fe, por lo que no debiera trascender éste sentimiento de mal pesar en nadie, y en absoluto, ni en quienes me conocen en ésta Vida de en Curso, sino más bien, en alegrarnos mutuamente incluso, en lo imposible que parezca, en creyendo, y misma y realmente a como, Creyentes en Él, y qué si así también, mismamente, el que lo sea solo en, Gloriarnos por él encuentro fraterno en Él, de un Vínculo e indistintamente en más Amistad, u Hermandad de entre Hermanos legítimos, y Verdaderos del Amor, y Su Paz en Reciprocidad, y Ésta, en mí alusión Es a ésta Convivencia también en y con mis propios hermanos, y mi hermana, la hija también de mí Madre, porque lo es sin dudas por mí parte entendiéndolo, en Él Señor, y del Inmenso Amor a su descendencia siempre, por La Impregnación del Mismo, y aunque quizás sea inconsciente y mismamente aún, en muchos parientes también como en tanta otras familias, y digo mochos, porque somos una familia muy amplia, y en Ésta, y así incluso sin conocer la Verdad, Cristo, pero qué en sí, la Misma, el que la entiendo, y así, y qué la comprendo también de entre la que aún nos rebosa, y aunque en nuestra minúscula medida al respecto en, (Familiar-Morada), y que Mismamente Ésta y así de algún modo, es la que modestos portaban como buenamente en sí, pudieron en su interior, e indistintamente, los míos, y a como así aún, tal cual me debo, a su humildad hoy, y en Cristo, Testigo exponiéndolo por tanto, suyos también en sí, el qué lo declaro, porque en Sí la porto, Espiritual y Cristianamente.

   En modo Tal, a que Es en sí, él conocer y comprender a cómo, Nuestra Propia Madre, y primero, La Virgen María, siempre, porque lo Es Santidad en Cristo, de Jesucristo, así Madre, Hermana, Esposa, y Amiga, en Cristo-Jesús de Su Santo Espíritu, y qué en cada cual, y a como acogida si también en éstos así, de Santidad, y como así a la de en quienes nos vimos en el tiempo pasado mismamente, como buenos amigos, conocidos y conocidas, paisanos, hermanos, y hermana, etc. etc. Es porque Espiritualmente También y así devenidos, el qué lo fuimos de algún modo cierto, antes, y solo en algunos pocos, aunque no muchos sin dudas, en los verdaderos que creemos, menos de lo que la gran mayoría piensa hoy, como lo generalizado y más corriente, y sí lo es, en deriva, a por sí solos, e individualizados en sí mismos y endiosados, prepotentes u altaneros, menos aún, y él que no lo entenderá en principio, quien no se esfuerza, cómplices de, y por velados, de sus irreconocibles u propios pecados aún en sí, y que se niegan a afrontar y a combatir, por sí mismos, e incluso, y ni con ayuda para expulsar a, su mal, y aunque la invitación al banquete Real de Nuestro Señor, a Su Reino, Tal como nos recuerda constantemente También, el Papa Francisco, lo es ciertamente así, aunque eso sí, para todos, y así, por lo que no es tan fácil, sino es y sí así en, entrando con él traje de bodas, o sea con los Suyos, y a Su Conversión Mismamente de, y en Su Amor.

  Qué Son, o serán La Continuidad-Divinidad, en Él, para seguir caminando, y tan ilusionados en sí, como para conseguirlo por encontrados en definitiva de Ésta Conciencia, a más fraternales, entre sí y así por la Fe, porque, o se es en Ésta, y para los demás en tus prójimos, y así el que lo será para Nuestro Señor, Cristo-Jesús, u en otra muy distinta, y detractora, la que es en su contra total, por la incapacidad de conversión a Sus Preceptos, y Sus Mandamientos, y Solo Existenciales Estos, en Él Mismo y para quien por Él Los Profesa, y qué Él sí que quiere, el que lo sea en todos y cada uno de Sus Hijos porque Es Él Padre de Todo, y así Todo, lo Infinito, por Tanto, en Sí Él Física, y Espiritualmente También, y aun así y sin querer reconocer al Señor Dios Nuestro Jesucristo, el qué lo será Él y por ello también hasta en el confín de la Tierra, denominación concreta a Ésta, y que aludidos Cristianamente y así por Nuestro Patrono, de España, Santiago Apóstol, y de La Nuestra, y por Tanto, también, en la Misma, el qué cabría en algunos, el ser, de los Mismos Moradores, y él qué la habitamos aún, y así en percepción incluso, contando a muchos de éstos también, de entre los que en nuestro rededor, anduvimos de niños  jugando por las calles unidos, aunque sí en grupos indistintamente, y de distintos parecer ya a como niños, pero también, de una cierta Amistad, u Vinculados, mayoritaria o familiarmente de alguna manera, que por la Misma, y así, mutua, y conjugada, en dentro de la habitual ciudadanía el que se nos pueda y sí aun adheridos, encender la Luz, del discernimiento, o no, por contrario, y despreocupado de ésta, “Sensibilidad”, el qué es, u sería, él inicio, o los primeros pasos en, Cristo, y Viviéndolo en la búsqueda de las huellas espiritualmente en nuestro prójimo, a Jesucristo, y así del pasado mismamente, con la Ilusión, que nunca se ha de perder, tal a como tampoco la, Esperanza, y aunque en sí, intuyamos de algún modo, el que una parte de entre éstas, puede ser falsa, u la otra, verdadera, incluso de los de, en nuestro pueblo, él provincial, u correspondiente, del de, nuestro prójimo, y él de cada cual, y porque el qué, sí en amigables u socialmente lo fue, y aun y sí, en una máxima, lo es, u, lo encuentras hoy, creciendo en valores dignos y qué incluso te sorprenden, económicamente también con, y en éstos satisfecho, el qué lo será de él principio, u bien relacional en una Convivencia aún más Consciente del Bien generacional, de la Paz, y del Amor Verdadero.

   Y que si también lo fue en su tiempo atrás, en la pureza de la niñez, éste tiempo y conllevado incluso, a cómo un aunque, pero qué si el mismo dentro de lo más sanamente en sí, y a como niño, en confianza, y la amistad que disfrutamos, y que en tal, por Tanto, es en la que me apetece buenamente, presumírmelo en sí de amado, para así y también del tiempo presente, y futuro, en el que lo es aún de entre los que en él de hoy nos vemos u encontramos reconocidos, y por supuesto, de entre los conocidos de antañón, misma e igualmente con un abrazo, si así es que, no nos vemos desde hace un tiempo considerado, y que así de alguna manera, es estar prendidos y “mártires en la íntima unión, pero así, en sí, evolucionados, y Viviendo en el presente”, y él que será si así, caminando en fraternales e indistintamente, y para el qué, sin renegar a la realidad existencial en adelante y en éste mundo de intereses, pero entre tibios, así fructifique, no de este mal deficiente y cizañero, si no ya, del bien sembrado y el que hemos de recoger con buen Espíritu, y en sí así, más en él inca pies del subrayado, a como siempre lo ha sido en él pasado ciertamente en La Fe del Señor, Nuestro Dios, Cristo-Jesús, también de nuestros antepasados, en quienes es, y ha de seguir en cuantos siéndolo así en, haciendo lo que en sí de cada momento hemos de hacer de bien, en la Paz, y para ella, que Es La Gloria Nuestra en Santidad, en Presente y Futuro de Continuidad, todo soportado en Cristo, y lo es en alusión en Sí, que lo Vivo, tal a como también los Mismos, en su paso, él qué nos transfieren, porqué así ilusionado lo percibo, por Él, en Reconocido, de Su Paz, Amor y Misericordia, que lo es Recíproca mismamente, en quien la busca, conexo, u de algún modo, la pide, y valga la redundancia así, tal cual, y en cada cual, qué y aunque de algún modo de inconsciente no poco, aún yo entonces, y porque Es, el qué comenzó y vino a mí, de su cotidiana y persistente fe pero de alguna manera, en la calma Suya, y al parecerlo así tan Natural, en la dé mi abuelo, que cautivó a mi confianza.

  Y que generacionalmente en la expresión y el testimonio manso y pacífico, en él bien, o sea, la ausencia de mal alguno, u de ninguna índole, él que intentó plasmar, y el que consiguió en sí unilateral y conscientemente sí, y con éxito, para mí, que lo digo de él, y aunque también como tantos, y tantos, así y mismamente, no menos que yo mismo aún, y tal, a como seguro él, el que sí lo hubiese querido mostrar más placentero aún, y con más, de todo lo bueno para los suyos, y aun así, el qué tampoco fue lo suficientemente bien entendido, y ni familiar, ni socialmente en, mi Abuelo materno, Julio Carrasco Jiménez, de quien me sentí, y aun así hoy También de su acogida, y que yo sí entré en su sensibilidad, y le entendí los últimos días de su Vida, cuando me abrazaba a la sombra de la higuera en el corral, y aunque aún muy niño, de en, su soledad u incomprendido, que se me cobijaba en sí, a como refugio fiel, y  también como en sí, en buscando un resquicio aunque insignificante que fuese, qué ya con más tiempo pasado, e incluso y si castizamente así en la expresión, a toro pasado, y en la percepción de discernimiento en los resultados de mí búsqueda interior en sí, y aludido, así en conjugándolo, y unidos entre sí, también en mí percepción, con la personal actitud en la mezcla familiar contraída, de en primicias y con una cierta Reciprocidad-Divinidad, en Paz , completada en sí satisfecho de él, sin más, y con él   sobreabundado temperamento de mi Abuela paterna, tan expresiva aunque muy modesta, y conscientes de ello así quienes la conocieron, y es en mí percepción, el qué, la donación mismamente qué mi Madre asumió, en siguiéndola en todo similar, Tal, a Rut, con Noemí, fue de ella u él qué la acogió muy gustosa y agradecida siempre, y dicho también, por boca de mi Padre, y muchas veces que se lo escuché, el decir con gran alago por supuesto, de la misma, esto dé, ¡Si fueras hija de ella, no te parecerías tanto, a mí, Madre! Y, qué en lo Espiritual, aún es, y así la percibo, de sus gestos, lo bondadosamente que puede dentro de su mudez, y la poca movilidad, con ayuda, en Esta Caridad del Amor, para con todos/as.  

   Y así la de mi Padre mismamente también, aunque en sí me percibo, más en, Durán, que Barriga, pero qué no optante, por siempre, y en adelante, también por aludido, mi Padre, y así ambos, en Cristo-Jesús, él que ya Es, mi Padre, de Junto Al Padre Creador Nuestro, Un Solo Espíritu Santo, por lo que Es en sí y ahora, ya La Morada, de mí alusión, en la qué generacionalmente y siempre, el que lo fue en sí de él por Tal la defensa de sus principios, y sus propios valores que luchó, y por ello dio la vida pacíficamente, y aunque por más que quieran mostrar algunos sistemáticos médico, no conseguirán ni, convencerme de lo contrario, tal su alternativa suicida, y por supuesto, ni callarme, ¡con las palabras, ni razonamiento científico alguno, y porque, el que lo es así, en La Descendencia sucesivamente, del que entran en Su Descanso de Paz y Sosiego, por Vinculados en La Propia Amistad Creada entre Sí, y de algún modo, la cedida conscientemente queriéndolo en sí, y así, en la de acogida Recíproca y mismamente, y el qué sin dudas, Es Vida Eterna, en lo Espiritual e indistintamente de entre Éste Vínculo, solo en, y por Él qué Dispone en, todos y cada uno/a, de en quienes, proponen, ya sea, mujer u hombre, pero no optante y como no puede ser de ninguna otra manera, a más Acrisolada, y Pulida en Su Mandato Divino por, Nuestro Señor Jesucristo, Generación Tras Generación así, en Él Santo Espíritu del Padre Creador Divino de Todo lo Infinito, Su Reino, Él Uno, con Él Otro Fundidos, a Su Imagen y Semejanza, y en Reciprocidad de las de en cada cual, con y sus propias posibilidades, de entre misma e indistintamente competidores pero, por el Bien General y en Su Santidad, puesto que de no ser así, ya, el que nos es conocido, y también así sabido, que hay una parte de quien no entrará jamás en Su Descaso Glorioso, sin Su Ansiada Conversión, Al Señor, Su Hijo Cristo-Jesús, en el grueso total aunque Latente, de entre éstas, las indistintas en variedad de intenciones, y en las de cada cuatro familias, u así Vivientes, en Él ya Encontradas, porque así de, en Ésta Naturalidad y asumida Mismamente, se han de encontrar, y qué en sí, Es en Conciencia, y de la qué entendiéndola, y sí así, que en Ésta mí Fe la Vivo, en Cristo, él qué comprendo más y mejor, a La tomada u Rescatada de nuevo, y así Siempre en Ésta, Sensibilidad-Divinidad, la que sea definida en Él Señor, y así el qué en Viviéndola Familiarmente, en Nuestro/a-y en Continuidad, Es porque, y según mi percepción de alusión, está Su Espíritu Mismamente Santo También en la Misma-Morada, y en Particular Tal, del qué se va su cuerpo mortal y en Santidad, de Ésta, y en lo Invisible, el lugar, en el descanso eterno, que en lo posible, y en Reciprocidad en lo visible, repercuta Su Regeneración en, Él qué nos Acoge, y del Mismo, y así indistinta y físicamente, en quien corresponde, pero Sí y, en Sí, en Espiritualmente y porque lo es Siempre, qué Es La Eternidad-Vida-Paz-Amor, y qué con él Mismo Amor Suyo, Continuidad lo Es, en Él qué Él, nos Acobija a Nosotros, y ¡Es mí Fe en Jesucristo Él Resucitado Hijo Único de Dios, así, en Sí!, y en el qué, y aunque en su final mi Padre y aún más desconfiado por algo de todo, y casi de todos también, fue por consiguiente, naufragado por entre él oleajes de éstas dos descendientes e indefinidas, aguas turbias por tanto, porque socialmente son las encauzadas en “sucedáneas” de la misma aunque del arrastre en su encuentro, y en la que algún tanto de éstas también, al parecer por cuanto de lo que se defiende con un cierto ímpetu, él que son de entre las devenidas y arrastradas así en velocidad torrencial e inconscientemente como en tantos, y tantas más desbordadas, y en vértigo a él espiral, o sinfín turbulento que los aglutinan, pero qué en definitiva y a como desastre u desorbitados, no poco desorientados de la Realidad, Verdadera, a mí parecer en Ésta mí Fe, terminó su vida, como uno, u otro más, de entre los incomprendidos también, y por la lucha de sus principio y valores, los propios y por los que en si por él mamados, de sus padres, mis abuelos, y que aunque así, creyendo en cuanto Vivía, él no pudo imponer su fe, pero sí éste principio, u Valor, en lo que creía, familiarmente, y que en sí al final, convertido y así convencido al Señor conscientemente, y a mí al menos, tal yo lo encontraba los últimos días aunque débil, pero sí más calmado, y en Su Paz, que le pedí, pero qué recientemente fue y aun así fallecido en la Residencia de mayores de, Torreórgaz, por al parecer de una inminente, y necesaria sedación, a como tratamiento de “confor”, que le llaman, ¡Pero qué para mí, en sí y aún, lo es tan incomprensible y así tan atónito!, que a como lo plausible, que le pueda ser para los que defienden ésta degradante alternativa, del derivado, de la eutanasia práctica, que con cualquier nuevo nombre, es aplicado, a cómo una normalidad, y con él qué pretenden escapar los culpables en sus propios delirios de, en lo efímero, donde se vuelcan y se revuelcan convencidos de ello a que es lo propio y merecido en éste tránsito u suspiro de vidas suyas, de en la que, sin previa información del caso concreto, y que no los voy a culpar por ello  directamente como tales, sino que sí el que lo son cómplices inconscientes del arrastre social, y en devenidos del mismo grueso, en el fundamento del mismo, y antes explicado, qué ni directa y ni indirecta, u de ningún modo, hacia mí fueron pronunciados, y aunque soy el segundo hijo de mis padres, sino que más bien, y aún peor, en previa e intencionadamente, de este también explícito al previo tiempo, fui familiarmente ignorado de esto, de la tal y gravosa, al parecer de aquella determinante actuación, aunque sí qué con posterioridad, y en el curso del mismo proceso de él, “tratamiento” sedación, ya en posterior, me informaron mis hermanos, él que lo habían consentido verbalmente, a los médicos, del 112, servicios Móvil, de urgencias, ya la tarde, u noche antes el 27, y del 28 de Agosto día de éste presente 2019 en él que consta la defunción. Y aunque sí y también, en unos días antes, en una entrevista ya y en una ligera insinuación, y de la cual, él que salí discrepando al respecto en la misma, con la doctora del centro en Torreórgaz, y mi hermano, el mayor, y mi hermana, que en sí, y por Tanto, aludido, percibí el que pasaría, pero ya que lo Es, de junto al Padre Creador él Único Dios de Todo Lo Infinito en, Él Hijo Unigénito Jesucristo, Amparados, y en lo Invisible, y lo Visible, en sí unidos todos junto a los Santos, Divinidad en que Es el que los Vivo en sí, y en sí lo defiendo Tal, y ya, en Principio y Valor, a como le prometí que lo haría, y así en la medida de mis propias posibilidades, como lo hice estando aún él, en vida, y en, Cristo-Jesús, también, y qué en más de una ocasión mismamente le demostré a mí Padre, y lo creyó ciertamente, y así demostrándolo pública u conscientemente de algún modo, en el salón del centro, en una exclamación, tipo suspiro, al verme llegar a visitarle, con un ¡hijo mío! Un tanto afónico, pero, Salido de dentro de Su Alma, y así junto a los demás paisanos, y paisanas, presentes y allí también residentes, lo oyeron.

   Por tanto, ésta realidad de nueva época y en Vida Eterna asumida, lo es ya, en partícipes, así en lo visible qué en sí, y en él Espíritu Santo, que Es él qué ve en lo invisible e indistintamente, en cada cual, y que en sí por alusión, es en mí percepción, en transmitiéndonos Él, de Su Misión, así, la propia Nuestra, porque es en latente Divinidad interior qué Él, está también en Sí, y con Nosotros, en él de todos y cada uno, porque humana y físicamente, y También al quedarse entre nosotros Su Espíritu Santo en, Pentecostés, así Oficializado, Es Él y desde entonces, y Generación, tras Generación Suyas, Nuestro Hermano mayor Espiritualmente y siempre con Él, aunque es notorio y solo, del de quien lo porta en sí, de cada nacida, o nacido, y así por Tanto, en los bautizado en, Él Mismo, y a como prójimo con él Amor Verdadero de Dios Padre, y éste en corrección permanente e indistintamente, desde Set, como él descendiente físico y Espiritual, a él tercer hijo de Adán-Jesús, en Continuidad Eterna del Principio de todos los tiempos, en Regenerando, y mismamente por la Fe en Dios, que Él y en primicias Así, ya lo Creó, y Es La Reconstitución en Su Continuidad de la Vida Eterna, y Ésta, la qué Portamos a como Cruz Vendita Nosotros Al Espíritu Santo, en él Cristianismo Católico, y así Católicamente Santos también, el que en particular y a como Comunidad Santa, y por Él Mismo, por el que fue así expandida en él Catolicismo, Tal, la Semilla de mostaza, Él en él Germen, y Su Reino, del Cielo y La Tierra, y así también los españoles en creyentes, es por lo que somos solidificados por la Fe, y así Consagrados a entendernos entre hermanas, y hermanos, incluso los de dentro de Casa-Morada, por los hechos realizados, ya y de, los litigios de antes y qué mismamente son pasados, incluso, por las guerras internas, y porque así tenía que pasar, y así pasó, y por ello son exterminadas éstas, ya con la lucha, en la Paz de Justicia Divina, y en Democracia-Divinidad entendiéndonos, con él bien generalizado en un término, con sus leyes enmarcadas e Impresas, y entre todos aceptadas, a Dios Gracias, a La Reparación individual y ya devenida en Divinidad así establecida, de nuestros antepasados en Nosotros, a como él sacrificio redentor que entregamos en Vida y así Eterna o Testigos, del qué tomamos en Sí, y por el qué así voluntaria y libres de mente, y sin coacción alguna, tal a cómo ha de ser también en adelante, y nos dimos ya, pero Solo en ésta denominada Conciencia y en Gloriosos de Paz Verdadera, y si así, él qué se nos concederá, porque tras, de tantas, y tantas e inhumanas que fueron las calamidades, ya sufridas y pasadas, por Tanto. A Dios Gracias Siempre, Porque, como nos recuerda la estrofa, en la canción, de Comunión Cristiana, en el Momento de Divinidad y que Es en la Eucaristía, él encuentro de lo Visible en Nosotros, con lo Invisible del Padre, Nuestro Creador, y Su Momento, cuando es a partir, y compartir el, Pan de Dios, y que nos dice así y como en tantas otras en ésta, ¡Donde hay caridad y Amor, ahí está el Señor! ¡Ahí está el Señor!

   Y encomendado, en mí misión desde el principio en la razón de ser, y desde muy niño, como todos y cada uno e indistintamente, del qué ha de ser si así, en asignado con la suya propia misión, y que lo es en la vida de curso, en viviente para Él, y así Consciente de ello. Y Yo qué aludido en sí por la misma ya, y a Tal en la propiamente de Procuraduría Familiar y Reuniendo, tal a cómo una más del pueblo Amado, en lo laboral, u profesionalmente acogido, y qué aunque en sí, de inicio y autónomo, que más tarde sería en S.L.U., que es en Cristo Señor Nuestro, dando Gloria, a Jesús, con María Virgen, y San José, Su Esposo, el procurar en Conciencia sobre todo, de ésta acogida con Amor y así el ser partícipe, a como Principios, y aún más, el que lo es también, por la globalización en la Familia universal Cristiana tan en Estima, pero, a una más de la diversidad, y no menos por supuesto, en ésta, para que en matrimonio eclesiástico u Espiritual y que lo Es aún, y entendiéndola mismamente Gloriosa por Tanto, de en, él día, a día, y así en sí, lo es al menos para mí, Familia, y sin Par aún, en las intenciones que describo, porque al casarme una sola vez y conscientemente ya de antemano, en Cristo, y ya también entonces, con mi Esposa, la madre, de mi hija mayor, Noelia, y que aunque en Tal, y ya está mi hija mediando e implicada, sin culpa alguna, pero por lo que me es, Espiritualmente alusión, el que la misma, relegue en su hija, y mi nieta, Lucia, y en La Primordial y siempre, que Es la, Virgen María, en mí Conciencia y También en sí, así, Pura y Divina por Su Hijo, Jesús-Cristo por Tanto, y el que fue de Esta Fe, en matrimonio ya en el ambiente de mi rededor, ejemplarizante en Ésta acogida, en Esposa y también, Madre de Dios, por medio del Espíritu Santo, en Sí, porque Vive u Vivo en Él, y así ya de antes en él hecho descrito, y ahora, en el presente, a Dios Gracias, y que tras mi experiencia en sí a como siempre, que es de muy feliz, y así en no menos a y como una más, de entre las afortunadas Familias bien avenidas en él, Amor Verdadero, él entendido según en, Dios y Nuestro Señor Jesucristo, qué aunque de en la Terrena, pero como siempre en sí, y así de algún modo de, Espiritualidad-Divinidad, y que aun así por lo que fue también rota ésta y en sí voluntariamente, y por la hostilidad en falta de compromiso a la corrección trascendental en la parte, así que consciente y en una decisión emotiva, le pongo para ello razones encima de la mesa, pero por él desamor en ésta que me sorprende, y que atacaba incluso moralmente en mí contra, por lo qué rompí con la, exesposa ya hoy, y desde entonces, y así a nuevamente en sí, es aún en ejemplarizar incluso con éste pecado, en su propio proceso en curso, Siempre del Espíritu Santo, que en mí percepción, y aludido en sí, la ciudadanía y ésta, aunque ni en lo social, y ni Cristianamente en sí de esta, es el que la Misma, aún él qué quede rota con un miembro existencial, y con la bandera de la misma en alto, pero sí también y aun, en concubinato, y sí que como un producto más de la ensalada, también lo es tolerado e indistintamente, y que por él mismo pecado original, señalados somos entre los pecadores aún todos, y aunque más bien, el que en mí Continuidad persistente y en Tal, Familiarmente, me es de más Paz y tranquilidad, e ilusionado, y así aumentada la Misma en, más miembros de Paz, y es en mis circunstancias humildemente, él insistir en la confianza de mí Fe, y porque de alguna manera esto, lo fue indistintamente y así siempre de entre las mismas, abocados en la división de Divinidad en quién la percibe, y para ello nos fue anunciado, por Jesús: En una familia, de cinco miembros, dos estarán contra tres, y así, tres contra dos, y es el qué de entre tantos damnificados, y quizás a como uno más, y así lo percibo, para así y en sí, sea en testificando al bien de, Su Amor Verdadero, y contra este mal, en plagados del mal amar, en promiscuo, pero que el que si no hay conversión, se encona por empecinados de facinerosos u facinerosas, donde radica la mala convivencia, e incluso las más dramáticas, hoy conocida como, violencia de género, y tantas más en similar, qué socialmente está sobreabundado en un desbordamiento del todo, en la negación, a la Madre, y al Padre del Cielo Real.

   Y qué si así a convertidos, y que así fue también el yo entenderlo por supuesto en sí, y que lo creo en Conciencia, el que lo es en Él, Auténtico Espíritu Santo de la Tierra, y porque de cada vez si se degenera, lo es también, con más desatención, en no menos, sino qué multiplicado, en mucho más, menosprecio e incluso, en no pocas familias y ya en costumbre de muerte física, en tanto o más, que a una carga familiar, y que en algunos casos lo es conocido u entendido con celeridad, a como muy pesada, y a Tal también, es el que mi lucha contra ésta aberración social del menosprecio y en contra de la Vida, y así en la de cualquier ámbito en ésta, y qué así aunque Familia a como La Descendencia del Divino Sacrificio, Sí que Es por Tanto, La Amada, y en mí alusión, lo es por consiguiente, a autocorregirnos en sí mismos, y así primero, a como él paso más fundamental, y porque lo es él más propenso en sufrirlo, los que somos abocados en la incomprensión social, y como a un distintivo visibles, no menos de acorralados, y a que mutuamente, él qué se nos choca entre sí a unos, y a otros, contra algún concepto, tipo de imperativo Espiritual de cualquier animal e indistintamente de a lo merecido, así en algunas de las maneras, y que aunque inconscientemente de esto, lo es del caminar en ésta nuestra sociedad, y por nuestros pecados particulares, de los personales en definitiva, cometidos de la concupiscencia aún en la misma, a oscuras, u sordos, y carentes siempre de algo, pero que también lo es de, Sensibilidad, y qué en latentes, y aunque sí de algo aún queda de la Misma, Es la que surge el Milagro Glorioso, en él discernimiento, donde encontrarás la positividad, más pausados, y a resolver en una decisiva Renovación en Creativa de algún modo, pero Regenerando.

   Y qué en sí Es, concretamente a como él hombre que he encontrado en lo posible de sí mismo, y humano, y así de Santidad en descendencia, de entre el linaje en las distintas y diferentes cuatro familias directas mías, y las entre sí encontradas en convivencia, mis seres más queridos, y sus más cercanos e indistintamente, de las que nací yo, y de entre quienes me crie, y jugué. Y qué tras el recorrido de los años, también en la intranquilidad de supervivencia, o superación personal, de cuanto lo cotidiano en sí conocido en mí rededor, así también, en busca del linaje de la mujer que a como tal, y qué en definitiva, lo es, en buscando lo apropiado al respecto, y a mí parecer u agrado sin más del bien, pero eso sí siempre libre y voluntariamente, aunque en sí y por supuesto, aún no es que la haya encontrado, en relación a lo más importante, que en mí lo es en, lo espiritual u relacionalmente y así específicamente, en más allá, de lo que solo y ya es que haya comentado al respecto, en los distintos y diversos escritos, de entre mis conocidas, y reconocidas e indistintamente, con más en razón, por la evidente, intimidad, pero que como siempre y en sí, así con cada cual, el que lo fue, es, y será, en respetada siempre, aunque por ejemplo, y en mí caso particular, y lo comprendo, el que me mal conocían, pero solo por impacientes, e intransigentes, y deduzco no más a por cuanto de su mala interpretación, si indistintamente se sondeara, a su mal acierto por consiguiente, el qué sin más adentrarse en el corazón, y en sí éstas, aunque dañando colateral y familiarmente no poco, por tanto las mismas, a que con escusas inconsecuentes, y celosas, por arrogantes en sus propios pecados, y que todos conllevamos, incluso que en cinismo, se auto-anulan, en sí misma, con respecto de mi confianza ofrecida humildemente, por lo que fue en experiencias y una más qué sin vincularse en confianza certeras o concretamente éstas, y así que como lo probable e ignorando a las causas del trato fraterno, de la misma amistad, o incluso, de mi estima, indistintamente por éstas, de lo más primordial a mi Sensibilidad Espiritual en sí, y la latente así de un respeto a la propiedad, y de cualquier orden, incluso, la de la propia mujer como tal, pero oculto en mis adentros de entonces._ qué en principio, y en definitiva, no es más, y ni menos tampoco, qué perseverancia, y constancia, en La Fe de mis mayores, Tal, y así, en Hijos de Dios, pero qué en Conciencia y en sí, es qué los hijos de Caín, fueron los eliminados ya, o sea, que no existen, porque cayeron todos sus representantes, en el desierto por Moisés, y por Mandato Divino de Dios, y no existen, y ni existirán más, ni volverán ya nunca jamás, y el Resto que lo Es en Divinidad, Son Todos los perdonados, y de Su Perdón Divino por Jesucristo, Él Resucitado, Espíritu Santo, y así, Es Mismamente el qué los Salvados a La Vida Eterna Son, en Cristo-Jesús, y de Su Espíritu Santo, de Él Custodio-Abel-Adán Santo Espíritu con Dios a Imagen y Semejanza, Cristo, Un Solo Alma, qué en Renovación y así La Misma, en fraccionadas diversificadas, aunque proporcionalmente y para Disponer a Su Agrado en quien Él quiera, donde Él quiera, cuando y Mismamente Él quiera, y Es la entregada y Propia e Indistintamente en Continuidad así, en Generación Tras, Generación, y de Momento, a Momento Viviendo, desde, Set-Adán-Jesús-Cristo, y que más gañán yo por jovenzuelo, aunque algo más tímido, y en muy diversos temas, pero en actitud de erguido y fuerte también a pesar de mí estatura no entre los altos, en afrontándolo por Tanto, sin sobrepasar dentro de mis Propias circunstancias, en nadie, de lo personal en mí prójimo, sin el previo permiso, a la confianza establecida con cada cual, que en sí de la misma, a como el sexo, mujer, lo es, porque del ejemplo Vital, ya antes expuesto, y por lo que a mi Fe Concierne es también, y al respeto, el que se ha de deducir, qué en Sí, solo hay y existen Hoy, por Hoy aún, y así Espiritualmente, en Cristo-Jesús, dos Mujeres Propiamente Mías y Reales en presente, qué Física y Espiritualmente Son, Una, y por más Pequeña, Es la primera, mi Hija Isabel, y Dos, y por Mayor, mi Hija Noelia, qué en, mi nieta hija Lucia, mismamente de en Su Tutora, de nuevo y así la Menor Es, y por en Su, Tutoría, La Mayor en él orden establecido, pero si ésta lo Es, y así lo será Siempre, Solo, si Dios así lo Quiere, para el Bien Familiar Nuestro y de mí Propio, hogar, y así en General de, él de Todos en Santidad, y del qué, o de la qué, se una indistintamente de la diversidad libres y voluntariamente en, Él Amor Verdadero y Existente en Sí, y él de entre Sí, así, en una Sola, Hija y Madre, y así, en Cristo, Él qué le Es dado la Primicia, en entendiéndolo en Sí, y sí Espiritualmente también ellas de lo Devenido en Su Bautizo, lo arán con La Misma Fe acogiendo, a La Madre de éstas en, La Virgen María, Reina del Cielo, y de Todas Las Madres, qué ya y porque ésta mismamente aunque, madre suya también, el qué en comprendiendo y aun conociéndome entonces, y tal como también, algunas más, que incluso interior u por a como Espiritualmente, el que lo intentaron adentrarse a conocerme, pero eso sí que también a, su propia manera, pero que no calaron por consiguiente en Sí, lo suficiente, y pasaron de largo, y tampoco así las seguí, porque soy sencillamente transparente con mis hechos de honestidad, y Un Espíritu Leal, y enamorado de mis Propios Principios y Valores, Los, heredados Familiarmente, y en Libertad de Sí mismo, voluntariamente testimoniándolos, a como Lo Más Amado y así, Conscientemente de algún modo de, Divinidad, en Cristo, y aun así no se me exteriorizaba ésta, u ni se mostraba, doliente o ardiente, y si tibia, al menos a mi Amor tan placentero, aunque modesto, sino más bien y en contrariando a como transitoria en sí latentemente, y tal, hasta un cúmulo suficiente de malas experiencias y al parecer suyas, que le desbordaba, superándola hasta el punto de esquivarme, y cada vez más cerrada en sí misma, por lo que no se adaptó a mí forma de ser, y ni doblegaba a la humildad, y de la que ella huía, pero que en suerte, y de entre sí nos fue compartida, porque nos correspondía, entonces y así, y Tal, a como la de ahora mismo lo Es, en la compartida con mi mujer, Madre de mí Hija Pequeñita, Isabel, en La Misma y Propia Confianza de mí Fe.

   Pero que son tempestades negativas, y qué se superan en sí, indistinta y fácilmente, cuando hay Amor Verdadero, y no con intercesiones en algún tipo de interés por medio, e indistintamente, de cualquiera en él que éste sea, y qué aún, es en la ilusión expuesta con ahínco, él qué se supera por la Fe en Nuestro Señor porque Él Es Amor, y aunque ésta, lo sea latente aún en sí de cada cual, en, y con la, Lealtad al Amor Verdadero, y humildes en la propia circunstancia, y que hoy por lo contrario, lo es de prepotentes en sobremanera, y al parecer tal, a la mujer del cesar, sin Dios que necesiten, que es lo qué política e interesadamente son las intenciones, qué se mal relacionan con la mala interpretación al error, en concitando a la diversidad de los indistintos casos, u ejemplos aunque, muy distintos y por la tibiez de la gran mayoría, y qué sin quedarme corto, lo es que están perdidas aún, y perdidos e inconscientes, del hecho a la Verdad, qué a cómo plagas de la tibiez y obligadas por los vientos a migrar, por lo que en la necesidad de lo necesario en el día, a día, se les mal interpreta a algún tanto, y así acaparándolo, generalizando en la vulnerabilidad del ser humano dócil por su naturaleza en Divinidad latente, abusando por consiguiente, por débil, e indefenso, que lo es entre tantas, y tantas._ Así en que si antes lo fue, en vaciando los campos, y llamando a la gran ciudad a los trabajadores de los mismos, para el rendimiento en las fábricas, y así quedando casi desiertos los campos, por falta de la remuneración salarial en éstos y premeditadamente, por lo que son bastante abandonados hoy, y aunque muy explotado también entonces, por los mismos, porque son los que eran, y los qué malvada y avariciosamente mueven los hilos de, las necesidades, de los demás, y de manera y formas impredecibles, Espíritu Somos, y queráis o no entrar a querer entenderlo, pero es, el que se revierte siempre en La Naturaleza Divina, y ésta protesta, a como el niño que llora en la noche, y no sabes por qué, pero en demanda de la necesidad, y a como protesta de ejemplo en la Misma, son ahora y reclamando las aves del campo también, y en demanda, de lo que ya no encuentran para comer en él mismo, así viniendo ellos mismos y en presencia también de bandadas, a las ciudades donde al parecer es, que se han de alimentar más, y mejor, por cuanto que cada vez son más, y más, especies las refugiadas en éstas, así en el exceso que clama sonoramente también en, él Cielo, y tal en causando problemas tanto de, salubridad, daños materiales u colaterales en la convivencia, ciudadana, por gorriones, periquitos, cacatúas, palomas, rabuas o chovas, cigüeñas, y todo es, en multiplicándose, pero, qué por una falta de voluntad, cualquier asunto, se puede atrofiar, a la ora de dialogar, o por contrario, el no querer ni intentarlo, u entender, a los conceptos reales, en oferta, y demanda, a como la Natural Ley de Dios, y que así mismamente, y de en esta fuerza irracional por desequilibrada, y la devenida, del egoísmo, la avaricia, la concupiscencia, en la ociosidad y la vaganza, que es la negación propia vago, y donde se reúne en su entorno no más que vicios, y costumbres negativas, todas contra la natural actividad creativa, y de La Procreación, totalmente contrarios y negando así a Nuestro Señor Jesucristo, que nos lo dejó a Sus Hijos y en doble enseñanza física, muy claro. San Mateo. Cp. 14. Vs. 16.

   Y a tal, es el choque natural, aunque por contrario, muy manipulado, por consiguiente, y así sin comprender para diferenciar de la misma naturaleza a, él denominado socialmente, como violencia de género y, o, machista, por las feministas, qué reivindicando desde todo lo malo del hombre, en su propio mal, le es en éstas a como él linaje heredado de entre los, y las nacidas en él resto, y aunque salvados u perdonados. Génesis. Cp. 3 Vs. 13 al 20. y repito, lo hacen en la ignorancia, que lo es atrevida, y muy atrevidas así, por groseras y concupiscentes por consiguiente, que en él cual de éste espíritu maligno, y manipulador, no menos, que del animal depredador, que es el que proviene de choques también espirituales, pero aunque de animados en espíritus irracionales sin ningún tipo de discernimiento, pero qué se decantan solos, por ser muy distintos sus hechos incluso, envejeciendo sin un aparente cambio significativo de espíritu, voluntario en sí, y en algunos pocos a cómo especie en declive continúan igualmente exhibiéndose, y entre los mismos enfrentados constante y mismamente, eliminándose de alguna manera, por poder como las tribus ya en desuso, aunque alguna aún como tal el que son ignoradas, u olvidadas interesadamente, otras, pero porque de un modo u otro, todos cazan en la misma jungla, y a como animados, lo es por él descarte, en manos de los fuertes, y hoy ya en urbanas unas, que lo son creadas artificialmente, y otras, en la natural igual y mismamente. Y que, aunque sí es cierto también, que la conversión al Padre, está siempre en disponibilidad y abierta de par, en par, la puerta estrecha, a La Santidad, y la que de alguna manera y aún, disfrazando la Verdad, de la Misma, manipulados por ciertos colectivos, más que acercarse a como hijo de Dios, se alejan más, y más, por Tanto, en su propia contra, continúan.

Pero en sí éstos en mí experiencia Espiritual, en Cristo, los son identificados familiarmente y de entre ellos, pero también indistintamente, de entre, tres desarrollos en su definición de actuación muy diferentes, y qué, en definitiva es aún, el que sigue, siendo en enfrentamiento, del que ataca, y el que se defiende, aunque ya colateral e individualizado, y hostilmente por consiguiente, en él residual excluido, por la admisión mostrada, en resignación y sin perdón que ofrezcan por medio, pero de ejecución física, y qué de alguna manera, lo es tomado socialmente, a cómo lo esperado, de una cierta probabilidad, él que tenga que suceder, y qué, a como en tantos asuntos que preocupan así también, en ésta espera, y de casos concretos: en lo laboral, de lo económico y financiero, en la sanidad deficiente, u en la programada sistemáticamente, en la enseñanza de intereses y engañosa, por comunidades que más que colaborar, al parecer, es en división y contra la unidad Nacional, en él abandono despreocupado, no de pocos casos, a los mayores, y niños desvinculados del lazo familiar, e indistintamente resuelto sin previo consentimiento de la misma, y aun en su derecho, es en la obviedad que desde estamentos oficiales se les quiere dar, u en discriminar, en falseando a la Historia Real y Verdadera, del Principio de los tiempos, y como si así y de un plumazo se pudiera tratar a las religiones, qué de algún modo son él fundamento de la Propia Fe, Vida, pero por nuevos modelos y aunque, del desacuerdo, y las desavenencias, que ya son ciertas en la democracia, y que si así, es que mal entendemos, a la libertad, por libertinaje, ¡¿no es de nuevo la tibiez?!, que de algún modo en aceptando a la resignación, que es muerte, en vida, como al preguntarse la misma, y no hacer nada al respecto ¿nos es justo, lo que socialmente está ocurriendo?

   Y en no tomando relevancia a tantos asuntos que sí son relevantes, y no de mucho fundamento de hostilidad, pero es en comportamientos pasivos aun así el avance del mal, y aunque estamos, Mundialmente Globalizados, ¡al menos teóricamente!, pero que distinto es la teoría, de la práctica, en el curso Natural, ¡verdad!, y no así por el momento, en lo artificial, y adulterado incluso, ¡no poco!, y el primero, a como casos paradójicos, y más fatídico, que es, de entre el espíritu del mal, y el mal mismamente, presentes, que termina fatal, o en homicidio total, y eliminados. Y segundo, y muy angustioso, de entre el mal, y el bien, pero en, inconsciente o víctima, por tibio y en resignación, aunque sufriendo ambos, parejas, u conyugues, y sin determinar, ni resolver nada concreto, y “enquistados, simbólicamente a en metástasis de algún modo neutralizados, entre sí, que es su resumen en cayendo, en enfermos crónicos” aunque envejecen, testimoniándolo así y desamparados en residencias de mayores aun incompletas en Él Amor y la cordialidad Familiar. Y un tercer caso, el más consecuente y complaciente, en caminando en la Vida, sin distorsionar, y ni adulterar a lo correcto y natural, por Tanto Saludable, Al, imitar la Vida, en Él Señor, y qué en principio, y aunque sea por inconscientes, y en inmaduros, pero lo es de encuentros entre, bien, y bien, y conscientes qué aunque equivocados en otra experiencia, y que indistinta y libremente, sin qué demasiado importe la edad, u así, sin ésta premisa, o si lo es, en gran diferencia, porque entre sí se avienen y maduran solucionándose de nuevo y solventando, una nueva y buena experiencia de Amor Verdadero, con otra pareja, sí lo buscas en él prójimo, ofreciendo él tuyo propio. Eclesiástico Cp. 25, Vs. 24 y 25; y Cp. 36 Vs. 21. Y San Lucas. Cp. 11. Vs. 15 al 26 

   Pues por alusión, la propia percepción, por la Fe en Jesucristo Resucitado, y si en la Misma, el que en sí es, para el qué y sin relacionar nada en absoluto, a lo mundano, y cotidiano de hoy aún y a evangelizar con Ésta, Santidad del Señor que nos aclaman Sus Ángeles, desde lo invisible, y que nos la da, si así Santo en Dadivas, Tal, a que somos Nosotros para tu prójimo inmediato, éstos Ángeles del tercer coro, o sea que, por multitud-muchedumbre, lo es en busca de una oportunidad, también de, Sus Santos. Y así vengo manteniéndolo solo, y en cuantos escritos ya os he publicado en mi Blog. Conciencia Española.Com, él que es Él Espíritu Santo, él qué está ya Él, en Potestad, de Santo Espíritu, desarrollando Mismamente y desde el principio Familiar de Dios, Su Plan, u Misión Salvífica en Sus Hijos, por lo que así, Es en Reuniéndolos, no puede ser de ninguna otra manera, y no optante, en España, qué en solo, el votar indistinta y unitariamente, para la consecución de la Paz Verdadera del Amor Misericordioso de Dios en Su Justicia Divina, y La Impuesta por Él También, que sin dudas contará entre los Mismos, pero en la definición de Su Amor, qué en estas nuevas elecciones, a la nueva oportunidad inmediata así de Reciprocidad Mutuamente Favoreciéndonos en, Él Mismo.

   Porque nunca nos abandona, y está con quien lo Ama, por Tanto, y También placenteros, más que él votar mismamente y así enamorados de lo que se hace conscientemente, tal cual, libres y voluntariamente y sin miedo, porque no estamos solos en la Conciencia de cada cual, o sea, Él en la “propia y suya” así qué ¡dementes, no lo somos!, pero reconocidos u identificados mismamente en sí ante Él, tampoco, lo es demostrado, y ni exteriorizado a la vista de mis ojos, por ejemplo, y es lícito él votar para percibir, o así aludidos a no temer, y en Su fortaleza que lo Es Consensuada en la Cruz Divina, en quien la lleva en sí También y para Conversión, o en cruz y como el buen ladrón, como el malvado de su lado vociferando, para sufrir la rebeldía, u así, en encontrado mismamente con todos en La Luz Gloriosamente y ya Viviendo Su Paz, porque Ésta, nos la pone él Señor a nuestros pies. Tal Él ya y, en Primicia, a Su Madre, La Virgen María, y a San Juan. Hoy en Él Papa Francisco, y La, Iglesia Santa Católica, de Santidad, en Cristo-Jesús.

    Jesucristo está a la derecha del Padre Único Dios de Todo Lo Infinito, y en Cristo, Sus Santos Apóstoles, a la derecha de Éste con Él, y así por tanto Nosotros, Santos y Ángeles del tercer Coro, Sus Santos, a la derecha de Éstos, él Pueblo de Dios, y así Es, en Sí, y en traspasado él Velo Santo, que Es él de la paciencia, la bondad, la lealtad, la caridad espiritual en él prójimo, a la ilusión, constancia y perseverancia etc. etc., entonces, ya lo es en Cristo, y Es Él, en todos Nosotros, Él Santo, de los Santos, y de los Santos, Nosotros, y Él Único, qué nos fortalece con Su Verdad, en Su Santidad, Amor Verdadero. Él es él Divino Liberado, y ya en Cristo, de nuevo Él Liberador, Él Hermano mayor, al ser Él, él primero, y Único, en La Relación directa con Dios al Resucitarlo de entre los muertos, y Nosotros, más pequeños y en Cristo, él Benjamín, y en La misma Relación, pero con los demás hermanos, y hermanas, en mediando él Amor Familiar, y en general, en él Pueblo de Dios, qué crece, más, y más, en la ganancia del Bien, y desfavoreciéndose con Él Mismo, al mal en sí solo, y así, La Vida Revalorizada, contra la muerte.

   Y Esto está conseguido mutuamente, y en él episodio del Calvario, de donde al Salvarse Él, También Salvó a los doce Apóstoles, Su Iglesia Santa, y qué en mirando al Horizonte ves También Salvos en, Ti, a Él, y a las Doce Tribus de Jacob. Todas, y cada una de las muertes tienen un Mensaje Divino, y que definen el final de una Vida, al dejar a su cuerpo, y de los momentos previos indistinta y claramente de los comportamientos, de los que siguen ciegos, y sordos, Espirituales desoyendo, e invisible, en renegados u de apostas potenciales, de Nuestro Padre Creador Divino de Todo lo Infinito, y así, sobre todo, y también, en él que Acoge, a Un Alma del Padre, Nuestro, que está en él Cielo. Jesucristo, Nuestro Señor. Bendito, gozoso y Amado del Padre, solo en aquel cabeza de Familia-Morada, que Es Creyente en Él Señor, Jesucristo Espíritu Santo. Y yo Solo en la Tierra, y por lo que me concierne, de lo que he aprendido, porque me ha enseñado, y en La Misma, de los Mismos Santos que están en él Cielo. Y desde Este, en Cristo, os puedo ya asegurar que los Santos, y Santas, tan solo están en él Cielo y en la Tierra, pero qué en la Tierra estamos, entremezclados, entre las, demonias, y demonios, disfrazados, de corderitas y corderitos, perras, y perros, pero de dos extremidades tan solo.

                                                Julio Barriga Carrasco.       

   Y en La Confianza de mí Propia Fe en Jesús-Cristo Resucitado en Sí de Él, y así haciendo Su Voluntad ya hace Varios años, en Ésta, me Suscitó escribir Esta Oración de Agradecimientos, Al Dios Divino de Todo Lo Infinito en Su Santo Espíritu. La que comparto ya en alguno de los escritos mencionados, entregados, y registrados, pero no aún publicados, y que ya particularmente desde entonces junto con Las Oraciones en Divinidad También Suscitadas en Hermanas y Hermanos en Él Señor Cristo-Jesús, y que habitual y constantemente en él propicio de cada tiempo necesario y agradecido a Tal indistintamente de en cada Momento Preciso o él Adecuado, Oro, y se lo ofrezco Al Señor, Dándole Las Gracias, y Pidiendo Más y Más de Su Gracia Recíprocamente que recibo para Su Proyecto de Vida Eterna en Sus Hijos Queridos y Amados En Éste, Así Dice.   



      En Sí Él Espíritu Santo, qué me dice para todos los Santos, y Santas, esta oración Santa. 



   Gracias Señor Jesucristo Hijo Único y Querido Divino de Dios Padre Creador Divino



De todo lo Infinito en Su Santo Espíritu, Gracias de Nuevo Señor por mostrarme



Al Padre Creador Nuestro, y mantener mi Plena Libertad en Conciencia aún También



De éste Mismo Nuevo Momento, Postrado Ante Ti desde mí Gran Amor, y La Confianza



en mí Fe que Tengo Para que me instruyas a Tu Voluntad, En la Forma de Tus Preceptos



y de Tus Mandamientos, Porque Solo Así Y en él Calor de tu Inmenso Amor Y Misericordia,



Pueda Cumplir La Misión de Tu Mandato, que Es por Ti Dispuesto desde el Principio De Los



Tiempos, en Cada Una, y en Cada Uno, Indistintamente de Tus Hijas, e Hijos, qué como Tal



Quiero Voluntariamente y acepto yo La Mía que por Tu Gracia Divina me Corresponda



Llevar a Cabo En Tu Divina y Santa Gloria, Tal y como Era en él Principio lo Es ahora y



lo Será por Siempre, Gloria al Padre, Gloria al Hijo, y Gloria al Espíritu Santo, como Era



en el Principio lo Es Ahora y lo Será por Siempre y por los Siglos de los Siglos. Amén. 



¡Que así sea! Amén. Amén. Amén.