Eternidad, Vida en Cristo-Jesús
Resucitado
Eternidad,
Vida en Cristo-Jesús Resucitado, Hermanas y Hermanos, Es, un Proceso Sucesivo y
Eterno que Espiritualmente no para en Renovarnos, Validándonos e
indistintamente, desde la niñez, y en la juventud, y tanto, de adultos, u en la
longevidad, en el Espíritu Santo de Su Hijo Amado, Jesús-Cristo, Imagen y Semejanza
Al Santo Espíritu, Dios y Padre Creador Nuestro y de Todo lo Divino e Infinito,
Generación, tras Generación, y qué en Nosotros, según en mi Alusión, y Discernimiento,
en Cristo-Jesús, de Su Santidad, Es, u Somos, por Tanto, Hijos de Su Espíritu
Santo, y no menos, qué de Su Santa Gracia-Divinidad, en Alusión, y La Propia
Percepción en Él, en qué al Respecto, y de con Los Hechos Vivificándole, Él Nos
Lo Corrobora Viviendo en el Día, a día, de la Convivencia en él Entendimiento y
La Comprensión de Su Espíritu Eterno y Misericordia Redimidos, y Juntos a Él, Su
Reino, para con los demás, hermanos, u prójimos, y Viceversa Recíprocamente Sirviéndole
y Así, de Entrega, en La Forma, a, Su Cuerpo, con Él Rostro de Jesucristo, La, Iglesia
Católica y Romana Santa, Eternidad Suya y Nuestra, en Él Espíritu Santo, Él
Quien que todo lo Puede y con Sus Doce Hijos Amados, Los Doce Apóstoles, y en
Cristo, Su Morada. Un Alma.
Por lo que, no olvidemos en el Corazón de
Divinidad, en Cristo-Jesús, el qué, él, ¡Pero! O sea, La Evolución, e Imperativa
del Padre, a Sus Preceptos y Mandamientos, como También, por y ejemplo, a la regeneración
en las diversas y muy distintas especies, y por consiguiente de ello, Es el qué
sin La Fe Reconocida, por Tanto, en Nuestro Señor Dios y Padre Eterno Jesús-Cristo
Resucitado, Humanado, Así en Su Hijo por Él Amado, e Hija, y Madre, Esposa
Amada en Su Adopción, Trinitaria e Indistintamente en Encuentros, de Bautizados,
y en Primicias Preferencialmente, Primordial que Es del Espíritu Santo, La Continuidad
y de algún modo en, Dignidad, en qué sin Él, y ni sin La Misma, no podría ser en
más, qué efímeros y simples idólatras, endiosados e inconscientes de entre sí ideológicamente
sobreviviendo a su interés y solo personal, y mismamente en degenerativos así, porque
lo es en contradicción contra sí mismos, indistintamente, y el mismo, ¡Pero!, e
inicial, o sea, que también, en negativas, al reconocimiento, a la
Reconducción, qué Indistinta y Personalmente Es Devenida de Evolución Eterna, u,
Interna, Su Santo Espíritu, Vida de Nuestro Señor Jesucristo, ¡o no!, en el que
y por incredulidad de sí mismo, en éstos, ateo, e increpante, hostil, para la
consecución de objetivos, incluso, en denostación, auto-degenerando e inconsciente
de La Verdad, Vida en Eternidad, a lo que haga falta para éstos mismos, el degenerar
presencialmente de en vidas efímeras, en el deseo, más, que no del Amor
Verdadero, en Su Vida de Eternidad, y que Nosotros Hijos Suyos afrontamos Libres
y Voluntariamente, Vivimos y no ya tanto, ni solo, de manzanos, y a como tal, Inicio,
de Libertad y Reconducción, porque sin Su Eternidad Vida de Su Santidad en Cada
Cual, Glorificado e Ilusionado a Su Agrado, en los Mandamientos y Sus
Preceptos, y que son los Mismos, y no Varían, ni en una tilde, de La Ley de
Moisés, ni en Los Santos Evangelios, e Incluso, y para incrédulos, de Su Buena
Nueva, Él Reino Eterno. Vida Espiritual, Espíritu Santo. Un Alma. En Evangelización,
Así, Pueblo Amado, Laica, u Seglar, También, con Su Iglesia Católica y Romana Santa,
Eternidad. (Reino e Iglesia, y en, Viceversa, Iglesia y Reino) Las dos caras de
Una Misma Moneda. Y, Unidad, en él quien que la posee, en Propiedad, y a cómo,
medida Rebosante en Su Eternidad, a La Cual, que se hecha gratis, se Da, Espiritual
y Trinitariamente Gratis en, y con, la Limosna de Nuevo, al Templo Sagrado, y
en Continuidad, con él de Cada Cual, y en Sí, Santa, u Santo, Profesando con La
Asistencia Física y Espiritualmente, por Tanto. Génesis. Cp. 6. Vs. 1 al 3. Y, Apocalipsis Cp.10. Vs. 11.
Julio
Barriga Carrasco.
La Oración y qué en un
Principio, la inicié, inspirada tal para en una canción, y qué os la pongo y de
nuevo También, en éste Propio escrito, para qué en la razón, qué en aquel, u
aquella, le vea la gratitud, y que en Tal nos la ofrece Él Señor, También le
pueda, aparte de la oración, qué También quedará Tal y como ya la conocemos, a
adaptarle, una música, acorde a Su Respeto, y Agrado de, sus Preceptos, y
Mandamientos, y en Conciencia Mismamente en la Confianza de mi Fe,
Gracias Señor Jesucristo Hijo Único y
Querido Divino de Dios Padre Creador Divino
De todo lo Infinito en Su Santo
Espíritu, Gracias de Nuevo Señor por mostrarme
Al Padre Creador Nuestro, y
mantener mi Plena Libertad en Conciencia aún También
De éste Mismo Nuevo Momento,
Postrado Ante Ti desde mí Gran Amor, y La
Confianza en mí Fe que Tengo Para
que me instruyas a Tu Voluntad, En la Forma de
Tus Preceptos y de Tus Mandamientos,
Porque Solo Así Y en él Calor de tu Inmenso Amor Y Misericordia,
Pueda Cumplir La Misión de Tu
Mandato, que Es por Ti Dispuesto desde el Principio
De Los Tiempos, en Cada Una, y en
Cada Uno, Indistintamente de Tus Hijas, e Hijos, que como Tal
Quiero Voluntariamente y acepto yo
La Mía que por Tu Gracia Divina me Corresponda
Llevar a Cabo En Tu Divina y Santa
Gloria, Tal y como Era en él Principio lo Es ahora y lo Será por Siempre,
Gloria al Padre, Gloria al Hijo, y Gloria al Espíritu Santo, como
Era en el Principio lo Es Ahora y lo Será
por Siempre y por los Siglos de los Siglos. Amén. ¡Que así sea! Amén.
Amén. Amén.
Julio
Barriga Carrasco.
Así Católicamente y con Éste Mismo
Espíritu nace, Él Credo Largo como es conocido en Nuestra comunidad, Cristiana,
Tal, como el Credo Católico, y él qué en Sí, y así en la confianza de mi Propia
Fe en Jesús-Cristo me Profesa en Su percepción que me Alude, percibo y Creo. Y
a diario lo medito en Discernimiento junto con Las Oraciones en Las que Creo y
Vivo.
Creo en un solo Dios padre todo Poderoso.
Creador del cielo y de la tierra, de
todo lo visible y lo invisible.
Creo en un solo Señor, Jesucristo, Hijo
único de Dios,
nacido del Padre antes de todos los
siglos: Dios de Dios, Luz de Luz,
Dios verdadero de Dios verdadero,
engendrado, no creado,
de la misma naturaleza del Padre, por
quien todo fue hecho; qué por nosotros,
los hombres, y por nuestra salvación bajó
del cielo, y por obra y gracia
del Espíritu Santo se encarnó de María,
la Virgen, y se hizo hombre;
y por nuestra causa fue crucificado en
tiempos de Poncio Pilato;
padeció y fue sepultado, y resucitó al
tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo,
y está sentado a la derecha del Padre; y
de nuevo vendrá con gloria para juzgar
a vivos y muertos, y su reino no tendrá
fin. Creo en el Espíritu Santo,
Señor y dador de vida, que procede del
Padre y del Hijo, que con él Padre y el Hijo
recibe una misma adoración y gloria, y
que habló por los profetas.
Creo en la Iglesia, que es una, santa,
católica y apostólica.
Confieso que hay un solo bautismo para
el perdón de los pecados.
Espero la resurrección de los muertos y
la vida del mundo futuro. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario