¡DENOSTADA VERDAD!

Desde la fe de mi Espíritu en Jesucristo nuestro Señor hijo de Dios Él único todo poderoso en el Cielo, y aquí en la Tierra donde está para establecer a los hermanos en sociedad de salvación en su Reino que con Él Espíritu Santo que recibimos en el mismo bautizo llevado a cabo y en su día indistintamente de cada uno, pero en el que todos quedamos con el deber encomendados en la misión para Éste como cristianos creyentes a ser, sacerdote, profeta, y Rey.

   Dice el señor: El que no entra por la puerta en el redil de las ovejas, si no, que escala por cualquier otro lado, éste es salteador y un ladrón corrupto. Pero el que si entra por la puerta es buen pastor de las ovejas. A éste le abre el portero, conoce a sus ovejas y las llama una por una y éstas, les siguen a Él porque conocen su voz, las cuida y no deja que ninguna se pierda, y si esto ocurre, la busca hasta encontrarla para no dejarla caer en las garras de lobos y buitres carroñeros. Porque tuve sed y me distes de beber, tuve hambre y me distes de comer, estuve desvestido, y me distes ropas, estuve enfermo y me visitasteis. ¡Quien cree en mí y, cumple mis preceptos vivirá eternamente!

    Esta es, palabra de Dios. Amen.

       Este escrito es de un hermano cristiano laico que ama a Jesucristo.

¡DENOSTADA VERDAD!

¡Denostada verdad! Ésta que al parecer tan difícil defensa se le encuentra, ¡Tú, tan depreciada verdad!, dejando meter con calzador, como si a la par pudiera el corazón del ser humano creado por él único Dios todo poderoso, caminar y convivir con la mentira, sin rubor ni exaltación de éste, tú, verdad, que tienes de testigo visual a la buena y aliada a la razón del bien y el buen hacer, y a la bondad en la expresión natural de protección al débil, también a la estabilidad, y si todo esto aún fuera poco, tienes al fuerte equilibrio, y a la misma serenidad con la causa natural por ser la verdad tal es. ¡Y si estas son amistades solo de intereses, pues para llegar sin locuras a conclusiones certeras y correctas para el bien! ¡Un auto-chequeo! ¿Cómo se puede defender tan soberbiamente a la desvalida fuerza moral, la mentira, y ni dar medio paso con seguridad en ésta? Sino, por la asombrosa e incoherencia de su aliada sobornada pecadora, la cobardía natural misma, físicamente en cada quién la quiere portar consigo, que inconscientemente o no, en muchos casos, y con el relativismo y generalizando todo como semilla del mal en expansión siempre si, subyuga, incluso cediéndolo con voluntad y agrado del mismo poseedor de la verdad. ¿Por qué esta práctica de ciegos e insensata y absurda química? ¡Qué, ni come, ni deja comer! ¡Ni prospera, ni deja prosperar! Es, ¿Por respeto? ¿Cómo amigo sociable? ¿Por búsqueda de amistad incondicional? ¿Por cinismo y un gran porcentaje de hipocresía? O ¿Tal vez, verdad, tú, te crees que ya eres una duda consolidada como se te quiere hacer ver en el mundo de la mentira? Tal como ya el mismo Poncio Pilatos en su poder le preguntó a Jesucristo en su juicio ante éste, al apoyarse en ella, ¿Y qué es la verdad?, ¡teniéndola por supuesto claramente ya en duda!, O ¿Es por necedad ignorante sin sopesar daños colaterales, sin más? Han pasado ya muchas épocas, aunque asumidas por la sociedad contemporánea, de bárbaras, como no puede ser de otra manera por las formas en que se cometieron tantos abusos y siempre contra él débil, tantas traiciones, tantas conspiraciones y de tantos gobiernos, y en tantas ideologías, o creencias, que como no decirlo también, fue éste perjuicio causado en parte de un mínimo porcentaje del clero, en la Santa Iglesia Católica, creyéndose a sí mismos por supuesto, en su cuenta e independientemente del Espíritu Santo, por el desvío del mal  adoptar y albergar al materialismo en los pobres corazones de éstos, con la mentira, comprometiendo con abusos de privilegios que nadie tenía entonces, debido a la facilidad de cualquier administración acceder a ésta, y viceversa. Hoy día, más pronto, que tardando aún más, para conseguir una sana esperanza, que sea puesta en el amor a Dios, y en todo lo que a Él le agrada, para que en su misericordia nos conceda dándonos una nueva sociedad donde sepamos recuperar el sentido de la verdad de vida en todo su sentido, y del respeto mutuo al mismo bien, en cualquier expresión que éste se represente individual, o socialmente, y si no se sabe en estos mismos términos diferenciar, y también separar, apartar, alejar, descartar, anular a la mentira, con respecto de la verdad. En mi opinión, como sociedad entramos en degeneración absoluta, y por consiguiente obviando, incluso retando frontal y socialmente, los preceptos descritos en las Sagradas Escrituras por Dios, que  son corroborados como nueva alianza con los hermanos que creen en la muerte y resurrección de Él único hijo de Dios, nuestro Señor Jesucristo, en los Santos Evangelios que todos tienen a disposición de los creyentes, y de los no creyentes, en la Santa Biblia.

    Como ejemplo doy a conocer para hacer alguna mención que conste en este escrito al respecto, una sola verdad, que es mía, como ya dije hace tiempo en algunos de mis escritos, y he vuelto a recalcarlo por ejemplo, más recientemente en la conferencia, presentación del (Proyecto de Integración Laico cristiano también en lo profesional). Y es qué visto ya en mí vida digamos de solera, lo visto, y oído, lo oído, en los políticos, y sus políticas, teniendo por tanto en consecuencia a éstos sucesos, que tomar la decisión en conciencia, en mi Espíritu Cristiano Laico, obviar por completo socialmente en mi decisión, y la de los que me siguen porque así éstos también lo verán como tal en éste proyecto social que con mucho placer y entrega expongo a la sociedad actual de hoy mismo, que en mi Espíritu como creencia, y para los que se acercan a éste, solo reconozco a buenas personas, buenos hermanos, buenos ciudadanos, de fe, creencia en nuestro Señor Jesucristo, de su muerte y resurrección para el Reino de Dios. Por tanto en mi opinión, ¿Porque no alternativa de gobierno cómo sociedad de bien qué es Jesucristo? ¿Y porque ha de ser el gobierno, solo de izquierdas y derechas y sus aliados de turno que jamás muestran el corazón para darse la mano y colaborar en una dirección coherente de sociedad y de unión en ésta en común de todos, y no de desunión, que es lo evidente, y si no se remedia, por los siglos, de los siglos hasta que Dios quiera, si así lo queréis, digo?

                                    Julio Barriga Carrasco.